Qué tema tan bonito. La letra de Steve Earle es una historia de un tiempo parecido al de ¡Qué verde era mi valle! de John Ford, minas de carbón, pobreza y patatas hervidas para comer, postales en sepia que también han reflejado Buddy y Julie Miller en su último disco Written in chalk. Levon Helm se apoya aquí justamente en los coros de Julie Miller, y la canción es una leyenda de un tiempo que nunca hemos vivido, pero que la música y la letra lo hacen real ante nuestros ojos. Música evocadora, sencilla y buena.