martes, enero 29, 2008

59 SEGUNDOS

En 59 segundos, el programa de debate que se emite ahora solo para Catalunya, le dan más micro que nadie al tal Girauta, que no me cae mal, aunque él mismo sea como una indigesta calzone rellena de Cope y Libertad Digital. Bien, pues cuando Girauta interviene incendia el debate, y los realizadores del programa lo saben, y le dan sutilmente más palabra que a los demás, tiernos columnistas, abogadas, periodistas mal acostumbrados a las tranquilas tertulias de Catalunya Radio y similares. Está claro que en el mundo ya no importan los argumentos, el equilibrio, sino que hables alto y claro. El concepto "indignarse" o "montar el pollo" tiene millones de seguidores. Si tienes o no razón es lo de menos. Quéjate, salta, muerde. En eso la derecha ha creado escuela.

KISS IN EUROPE


Una instantánea de la banda más caliente del universo. Es de su periodo más freak, a principios de los ochenta, cuando no querían dejar el maquillaje y a la vez íban con su vestuario más "Fama" y "Studio 54". Estaban confundidos, el heavy de los 80 les dejaba de lado y tenían miedo porque se les pasaba el arroz. Iban de discos poppies a obras conceptuales en una trayectoria sin sentido, que por fin enderezaron cuando se despojaron de sus pinturas de guerra y firmaron el gran Lick it up.
A todo esto, la foto era para celebrar que Kiss están de gira por Europa. Yeah, en Mayo y Junio. Solo quedan Gene y Paul como miembros auténticos, y a Gene casi que no tengo ni ganas de verlo. Pero si se pasan por aquí, o cerca, cojo y voy. Qué coño.

TED NUGENT: "TED NUGENT" (1975)


Si, es un facha impresentable, pero lo es tanto que ya es en si mismo una caricatura. Amante de la caza, de Bush Jr., anti alcohol, anti drogas, anti hippy, faborable a la guerra de Irak y a cualquier otra guerra en la que se meta su país. Es Ted Nugent, hiperactivo y egocéntrico, y siempre estás a tiempo de comerte un buen chuletón con sal (a él le encantan) y escuchar su primer disco. Un crack de los setenta que, como no, se llama como él: Ted Nugent.
Ha sido un día duro, trabajas hasta las once, llegas a casa, y qué haces, escuchar Stranglehold, el primer tema del disco. Ocho minutos de clásico sin adulterar, una improvisación guitarrera de primera. Pero qué digo. Ted Nugent es carne de la ostia. Grasa incluida. Just what the doctor ordered, Hey baby, Snakeskin cowboys (¡menudo tema!). Su guitarra ya humeaba en este disco, ya era algo robusto y sabroso como un filete de buey. Descorcha una cerveza, sube el volumen, música para hombres, nena.