martes, marzo 09, 2010

JOHN HIATT: "THE OPEN ROAD" (2010)


Se abren los nubarrones, la nieve se derrite y en el frío cortante que todavía está, aparece el nuevo disco de John Hiatt. Vale stop, rebobinad, olvidad la tontería que acabo de escribir, son las ganas de dar una entrada a lo grande a este post, porque The open road se merece esto y lo que sea. John Hiatt ha decidido enfocar sus últimos lanzamientos haciendo poco ruido, susurrando a veces, encantado con el paisaje que ve por la ventana a sus cincuenta y tantos, pero este "nuevo" sonido, más sosegado, no había salido todavía del cascarón, o por lo menos es aquí donde escucho al Hiatt que hace que deje el libro, apague el ordenador, desconecte el móvil y me pierda en él. No me ocurre desde aquel disco acústico del 2000, Crossing Muddy Waters, que nunca he dejado de escuchar, sin desmerecer perfectas obras posteriores como la vital The Tiki bar is open o Master of disaster, (por no hablar de sus tiempos de fortuna, ya sabéis, Bring the family, Slow Turning, el maravilloso Stolen Moments y etc. porque John Hiatt no ha dejado de producir música brillante durante los últimos 25 años). Como digo, conecto enseguida con The open road, con la música que parece elevarse unos centímetros del suelo y con las letras, porque Hiatt es un escritor que supera a muchos otros mitos del rock americano, tiene un particular sentido del humor, talento, cultura y aliento poético, como en la espaciosa Homeland, una canción sobre la tierra y los antepasados y uno de los centros neurálgicos del disco. La misma The open road, esa Fireball Roberts por la que vale la pena parar el reloj, la poco resistible Go down swingin´... Este es un disco precioso, de portada terrosa y sabores largos como el buen café.