sábado, diciembre 19, 2009

PROHIBIRÁN LOS TOROS

Ahora en Catalunya vamos a prohibir las corridas de toros. Mientras, seguiremos consumiendo pechugas de pollo procedentes de aves que no se han movido más de dos centímetros en su cortísima existencia en pabellones donde millones de su especie viven quemadas con luz artificial, estresadas y aplastadas las unas contra las otras. El toro de lidia, que vive como dios y es un privilegiado, es la envidia de las reses que malmueren en las industrias cárnicas, de los cerdos que son acuchillados en vida hasta que pierden toda la sangre, hasta de las ostras que te comes, bien vivas y coleando en el momento de entrar en tu boca. A mi tampoco me van los toros, pero prohibirlos me parece otra estupidez más de esta política de bazar que tenemos por aquí. Es pienso para nacionalistas aborregados, que creen que eso nos hace más civilizados que los españoles; y es pienso barato para defensores de los derechos de los animales, que piensan que con esto la batalla está ganada. Todos celebran la posible prohibición, pero mientras, alguien, en alguna otra parte, se parte de risa con nosotros y nuestras inútiles discusiones. Catalunya está peor de lo que pensaba.