domingo, octubre 28, 2012

KISS, "MONSTER" (2012)

Todavía ahora, con este Monster rulando por el mundo, tendremos que escuchar a los aguafiestas de siempre que no entienden que Ace Frehley nunca podrá superar su promedio de un disco por década, y que Peter Criss es incapaz de sacar su propia basura de casa sin la ayuda de un equipo psiquiátrico. Paul y Gene hicieron lo que debían contratando al gato y al spaceman y luego deshaciéndose de ellos cuando empezaban a estorbar. Sonic Boom fue la prueba de su triunfo, un sueño hecho realidad para los que no escuchábamos nada bueno de Kiss desde... ¿Revenge?, y Monster es la consagración de esta nueva línea. Monster es rock n´roll sólido (aunque esas guitarras están demasiado producidas, hay demasiada saturación, como mandan los cánones actuales claro; cuánto echo de menos los espacios que dejaban los Kiss de los 70 entre guitarrazo y guitarrazo), canciones que no intentan entrar en ninguna lista de éxitos, y dar al fan lo que siempre prometían y nunca daban: un disco de Kiss que se parezca lo máximo al pasado y que no huela a naftalina. Hay canciones mejores que otras, claro, y a Monster le sobran dos o tres, pero destacaría sobretodo que el que mejor parado sale del asunto es Gene, el jodido Gene que tan mal nos cae. Ya dio el toque de atención con Russian roulette, el mejor tema de Sonic boom, y ahora dobla, ¡triplica! ese efecto con tronadas al estilo Dr. Love como Back to the stone age (orgásmica), Wall of sound , The devil is me o el groove estupendo de Eat your heart out, con cowbell del doctor Amor incluída. Este Gene mola, y hasta noto que es él y no un pipa el que toca el bajo. Gustazo. Paul en cambio me llega a saturar, su voz se ha convertido en un grito contínuo y si el tema no es muy bueno me cansa. All for the love of rock n´roll es muy clasicona, un placer, al estilo I love her all I can, y la canta el pequeño Eric con estilo. Tommy Thayer toca los solos en su punto, muy rockeros, y todo está en su sitio, sin putas mierdas ni teclados, ni intentos de sonar como este u el otro grupo. Son Kiss dando sus últimos coletazos. Sorprendentemente atinados, sonando a veces más como los Kiss de Animalize / Asylum (lo que no me molesta en absoluto; ese Hell or hallelujah por ejemplo, me recuerda tanto a King of the mountain) que como los Kiss de Love gun. Tantos años siendo mi banda de bandas, estudiando cada detalle de sus canciones, o de cualquier tontería relacionada con ellos, la verdad es que un disco como Monster me hace muy feliz, y estoy dispuesto a tolerar incluso su mediocre artwork. A partir de ahora, que se vuelvan a pasar por aquí y luego que chapen cuando quieran.

INTEGRATED ADVERTISING

La publicidad actual y la puta big idea exlicadas de forma original y creativa. Las marcas ya no se compran, se viven. De la publicidad unidireccional a la experiencia de la marca por parte del cliente en medios y redes sociales. Varias docenas de créditos de la carrera de publicidad condensados en poco más de 3 minutos.

domingo, octubre 21, 2012

THE CHRIS ROBINSON BROTHERHOOD: "THE MAGIC DOOR" (2012)

Empeñado en sentirse como la continuación de una gran saga que empieza con Jerry García o Jorma Kaukonen, Chris Robinson nos ha regalado el proyecto con el que ni soñábamos los deadheads. Una banda con todo el espíritu, el sonido, las canciones, la actitud de los Dead y encima con una personalidad propia absoluta. Han editado ya, con este The Magic Door, dos álbumes en estudio en un año, y sus conciertos son salvas a las jams, la improvisación, el movimiento ondeante de cabezas y brazos, los ojos cerrados y el buen rollo. No me decanto por ninguno de los dos discos, canciones de este The magic door, como la nueva versión de Appaloosa (de aquel sensacional Before the frost... de The Black Crowes)o la preciosa Sorrows of a blue eyed liar son comparables, sino superiores, a las mejores del primer disco. Sí que aquí las canciones parecen más orgánicas y definidas, pero me niego a decidirme. Para mi, el futuro de la música son ahora estos tipos, Chris, Neil Casal y los demás. El futuro es el incienso que sobrevuela sus conciertos, la calma y espiritualidad que saben tejer, pacientes, en sus temas. Otros se pelearán por sacarse del bolsillo a nuevas bandas, mitificar todavía más a Wilco o darles las llaves del reino a los Avett Brothers , qué sé yo... Pero yo me bajo aquí, en estas canciones. Que corran otros.

martes, octubre 16, 2012

LA FOTO DEL PERFIL FACEBOOK

La fotografía de nuestro perfil de Facebook o Twitter es el reflejo de nosotros que queremos dar al mundo. Ofrecemos orgullosos a nuestros bebés, sonreímos con nuestros perros, exhibimos nuestra agilidad en alguna playa durante las vacaciones, queremos parecer sino guapos, interesantes sin parecerlo, queremos que nuestra actitud sorprenda, invite, comunique aquellos mensajes que no nos atreveríamos a decir. Antes lo más parecido al perfil de Facebook (o de Gmail o lo que sea) era la foto del DNI, donde todos éramos susceptibles de ser terroristas. Los perfiles nos han dado la oportunidad de sonreír y presentarnos como queremos. Me parece bien que las empresas consulten los Facebook de sus candidatos, mejor una foto de perfil que un triste primer plano en la parte superior derecha de un currículum. Tanto criticar a la madre de todas las redes sociales que se nos olvida que algo bueno hace, por lo pronto, presentarnos sonriendo y felices, o mirando al mar, melancólicos, o solo nuestros pies en la arena, al estilo Instagram. En la abrupta realidad del día a día, tener siempre disponible un almacén con fotos de tus amigos, o conocidos, o desconocidos que creen conocerte, expresando su felicidad, no tiene precio.

domingo, octubre 14, 2012

RUSH, CLOCKWORK ANGELS (2012)

Hay algo de Rush que es una lección. Los buenos, los que trabajan, son los que triunfan. Pocas bandas se toman tan serio su trabajo como estos tres frikis, pocas bandas respetan tanto a su público, y pocas poseen pues una carrera tan coherente y trabajada como ellos. El mundo Rush es interminable, yo por ejemplo, soy fan de su etapa sintetizada de los 80, aunque ni lo que vino después ni lo que venía antes es peor. Símplemente que la melodía plastificada y aérea de discos como Signals o Grace under pressure o Power windows conecta más conmigo. Lo bonito de ellos es que puedes preferir cualquier etapa y jamás otro fan osaría criticarte por ello. Y hablando de etapas, este nuevo siglo está siendo para Rush el de mantener la nave a flote con seriedad y constancia mientras van dejando exactos discos de relojería progresiva, corazón de ciencia ficción y una energía impropia para la edad que gastan. Vapor Trails era excelente y potente, aunque algunos lo infravaloran, el disquito de versiones fantástico, Snakes & Arrows una gran colección de temas, y este Clockwork Angels, de esqueleto conceptual (el libreto va detallando bien la historia, pero yo no me quiero dejar la vista tratando de leer las letras de Neil Peart, ya voy haciendo con cada escucha), precioso artwork y notable calidad musical. Me gustan temas como BU2B o Halo effect, otros como The Anarchist no van a ningún lado y se me embarullan en el conjunto, hay pocos temas que despunten, aunque la sinfonía conceptual funciona muy bien y te mantiene atento un buen rato sin necesidad de parar y tomar aire. Los cambios de ritmo, el dinamismo y la velocidad del sonido Rush siguen intactos en este disco que los mantiene creativos en el estudio, porque en directo ya no tienen que demostrar nada, aunque lo hacen gira tras gira (nunca en este país, por supuesto).

miércoles, octubre 10, 2012

MARY GAUTHIER, LIVE AT BLUE ROCK (2012)

Se edita ahora un disco en directo, Live at Blue Rock, de una de las cantautoras roots norteamericanas que más admiro, Mary Gauthier. Su última obra, The Foundling, cortaba la respiración, con esa historia, la suya propia, de una niña abandonada por su madre solo nacer. Pero otros discos suyos, como Mercy now, o Between daylight and dark son igualmente recomendables. Las historias de Gauthier te mantienen en vilo, pocos narran como ella, solo con lo esencial, una buena historia y el tiento para contarla, dones que da el sedimento que deja la vida, las cosas que te pasan, las cosas que ves pasar. The last of the hobo kings.

martes, octubre 09, 2012

METAL CHURCH

Los dos primeros álbumes de Metal Church, el homónimo de 1984 y The Dark, del 86, son dos discos perfectos de metal. La voz de David Wayne ha sido históricamente infravalorada, el tipo tenía las cuerdas vocales de una navaja oxidada cortando piedra; luego el genio compositivo y las guitarras afiladísimas, precedente absoluto del trash metal de la segunda mitad de los 80, de Kurt Vanderhoof. El primer disco es el cruce ideal entre Black Sabbath y la New Wave of British Heavy Metal tal y como la entendían un grupo de inadaptados de San Francisco, mamada en cintas de casete recopilatorias de importación.
El segundo está entre mis álbumes de metal favoritos de todos los tiempos, también afilado como el primero pero con toques comerciales, como la adictiva Watch the children play. Metal Church cesaron su actividad en 2008, todavía recuerdo cuando allá por el 87 anunciaban por la radio su concierto con Metallica en el Palau d'Esports. Como digo, dos discos a las puertas del trash, influyentes e igual de incandescentes pasados más de 20 años.

miércoles, octubre 03, 2012

BOB DYLAN, "TEMPEST" (2012)

Mi principal preocupación era saber si Tempest llegaría a estar a la altura de Modern Times. Bendita preocupación esta, cuando Modern times (el disco de Thunder on the mountain, Nettie More, Workingman blues...) es uno de los grandes discos de Bob Dylan. Paladeando estos días Tempest, creo que si no está a la altura poco le falta. Bob Dylan nos está regalando un otoño vital de valor incalculable. Y no será ahora cuando empezaré a alabar como concibe sus tours, lo que ha mutado su música junto con su voz y su visión de la vida, su compromiso total consigo mismo. No sé, es Bob Dylan, un héroe del que podemos seguir disfrutando en la actualidad en todo su esplendor. De Tempest me quedo con su parte central, con la garra de Pay in blood, el honky tonk blues de Early roman kings, repetitivo e insistente hasta decir basta, con la magia de Scarlet Town, la forma en que desenrosca una maravilla como Long and wasted years... Canciones como Narrow way las hace con los ojos cerrados hoy día, al estilo Tweedle dee..., pero sigue siendo encantadora si la disfrutas verso a verso. Luegp está Tempest, el penúltimo tema, una canción-rio que nos cuenta... ¡el hundimiento del Titánic!, casi un cuarto de hora de historias de muerte, amor y un dios inmisericorde en medio del océano. Es el Dylan más dulce que recuerdo en mucho tiempo, "The watchman he lay dreaming / Of all the things that can be / He dreamed the Titanic was sinking / Into the deep blue sea". Qué canción tan valiente, construida de forma tan sencilla. Al fin y al cabo eso es lo que queremos, que nos cuenten un buen cuento con el que poder conciliar el sueño en esta vida que se nos ha puesto tan patas arriba. Gracias Bob.