domingo, diciembre 29, 2013

SOBRE HACERSE MAYOR & FELIZ AÑO

Hay que hacerse mayores con solvencia.

Superar los vicios lo tengo complicado, pero por lo menos dominarlos y que no te dominen ellos. Asegurar tu protectorado familiar, dedicarle la atención y los debidos detalles a ella (no des nada por sentado, el amor debe alimentarse cada día, disfruta de ello), y aprender a ser padre, claro. Sentir que tienes a gente con la que puedes hablar, y no me refiero a ser un coñazo llorón, sinó que sabes que están ahí y eso te mantiene cuerdo y te ayuda. Trabajar, intentar encontrar huecos en los que colar tu creatividad, aquello que te hace especial ¡eres único! Ser responsable de la cara que ofreces a los demás: sonríe, insisto, no seas un coñazo, no rajes a la primera de los demás; el mundo es suficientemente roñoso como para aguantar más malas caras y más mala ostia.

He visto la entrada a la tercera edad de mucha gente y me han dado ganas de llorar. No quiero envejecer y verme completamene jodido por dentro y por fuera. Quiero conservar las cosas que tengo ahora y que me hacen feliz. Me siento feliz de vivir como vivo, de pisar el filo del fracaso tantas veces y aún así divertirme. Y de regalarme aquí palabras que me ayudan y me miman ¡Feliz año!   

MOTÖRHEAD: "AFTERSHOCK" (2013)


Aunque a Lemmy parece que por momentos se le están agotando las pilas, dios no lo quiera, este Aftershock funciona muy bien.

Aunque no llegue al nivel de un Inferno, aunque suene más o menos igual que los tres últimos, y aunque sepas que a estos tipus les es demasiado fácil componer y grabar discos. Ponen el motor en marcha y pam, pam, pam, otro disco de Motörhead. Pero en fin, necesitamos esa química, la voz de Lemmy y todo lo que impregna a esta banda a la que amamos desde hace siglos.

Además, me recuerdan que el rock n´roll sirve para gritar, para alimentar tu mala ostia, para hacer crecer ese cabrón que todos tenemos dentro, sin el cual seríamos pura gelatina.

miércoles, diciembre 25, 2013

NICK LOWE ES LA NAVIDAD


Es evidente que los hay que circulan por un nivel superior. Y Nick Lowe entrega Quality Street: A seasonal selection for all the family. El disco que ha de sonar estos días en tu casa.

Él es un caballero inglés de ilustre pasado, que desde hace más de una década nos regala música delicada, sedosa, inteligente. El hombre que en 2001 compuso una obra maestra, The Convincer, o que el año pasado editó la mejor canción de 2012, House for sale.

Lowe es el hombre de pelo blanco, gafas de pasta, a quién siempre escucharé. El tío que todos desearíamos tener en nuestra familia.

miércoles, diciembre 18, 2013

LO QUE NECESITO

Como un robot, necesito pautas, obligaciones, cierta normalidad. Los hay que somos de fácil desestabilización, y si perdemos aquello que nos hace funcionar y circular en sociedad -enfermamos, nos quedamos sin trabajo, nos afecta algo que digan, algo que hagan- de repente estamos ahí en medio, desorientados, paralizados.

Pierdo con facilidad la dirección si no tengo un norte claro. No me gustan los jefes, pero los necesito. Me organizo si siento que hay alguien o algo que controla mi organización. No soy especialmente activo, pero si se paran las máquinas, se me rompen los esquemas y he de empezar de cero; levantar el castillo otra vez, desde los pilares. Sin embargo a veces pasa. Joder otra vez, a empezar de cero. Una baja laboral es una puta condena, estar en casa sin poder actuar es enfrentarme al aburrimiento y a la pereza, mis peores enemigos. No entiendo como hay gente que trampea para alargar sus bajas, o para regalarse unos días de vacaciones a cambio de no hacer nada. Yo no sé hacerlo, no por gran trabajador, es que noto que vuelvo a un punto del que ya no quiero saber nada.

Y me ha costado. (Re)construirme, sentirme orgulloso, repasar el día y ver que más o menos has cumplido, abandonar las lágrimas y abrazar la vida que tengo, con los míos y conmigo.

lunes, diciembre 16, 2013

¡QUIERO CANTAR, JODER!


Al final tocará hipotecarnos para poder cantar. El panorama que se le presenta a cualquier banda de rock que quiera expresarse más allá de su local de ensayo es tan deprimente como lo era hace cinco años, o diez veces más.

Salas que te piden pasta para tocar, tanto por entradas vendidas de antemano, tanto por el técnico de sonido, tanto por cascarte un par de birras mientras tocas. Y tocas en salas grasientas y putrefactas, con propietarios que tienen cero interés en buscar una propuesta cultural atrayente, y defenderla, y promocionarla, y facilitarla, y que acaban vendidos al fútbol de los sábados. Otros locales siguen intentando lo contrario, programar conciertos, facilitarnos las cosas a las bandas, pero son cuatro, y tienen los días contados; o cerrarán o pasarán de música en directo. No les compensa. Mejor el fútbol. A todo eso, las bandas se desaniman, no hay conciertos ni perspectivas (eh, hablamos de perspectivas ridículas ¡un puto concierto al mes no debería ser una quimera!) Y al final todo se va al garete.

El panorama rockero para los que queremos tocar (¡en inglés!) está deprimente sí, colmado de ratas y pequeñas miserias a 3 euros la entrada. Pero yo quiero cantar, gritar y retorcerme, que me salgan babas de la boca y que los que tocan conmigo me pateen el culo. Solo que tendré que hacerlo en la calle, si se puede, que creo que ya no. O en alguna sala claro, previa succión del miembro del propietario de turno.

OK, relax. Aquí un bonito vídeo de nuestra última actuación!

 

viernes, diciembre 06, 2013

DUERME

Por la noche, tu madre te deja en la cuna y luego hay una pequeña pelea invisible, los dos queremos taparte y cada uno te colocamos el nórdico de un modo distinto. Luego bajo la persiana con la máxima suavidad. Tú ya has decidido si duermes con alguno de tus peluches, y ahora nos miras divertida y tranquila, como si supieras que el trabajo ya está hecho y que solo queda dejarse llevar por un barco de colores hacia la Luna. Queremos que sientas que no pasa nada y que todo irá bien, y queremos que ese instinto no lo pierdas nunca. No nos iremos hasta que todo esté bien. Es importante. Ahora duerme.

miércoles, diciembre 04, 2013

YO, BLACK METALERO CABREADO


Llevo un cabreo monumental con el articulo de Diego A. Manrique (dicho sea de paso, figura esencial en la  historia del periodismo musical en castellano) sobre el black metal, a raíz de la edición en castellano del libro Lords of chaos, que narra las interioridades y miserias que a primeros de los novena condujeron a un grupo de adolescentes noruegos, militantes del naciente estilo musical black metal, a cometer dos o tres asesinatos y quemar un buen número de iglesias de su país.

Sí, en el articulo todo era darle vueltas a lo oscuro y sensacionalista del movimiento, a sus contradicciones y a su estupidez, por otro lado innegables.  Pero ni una palabra de música. Que una parte muy pequeña de los blackmetaleros noruegos fuera imbécil no significa que el black metal se redujera a eso. Se trató de un movimiento artístico de tremendo impacto, con bandas capitales como Emperor o Immortal, que grabaron verdaderas obras maestras de gélida y frondosa poesia nórdica y apabullante y diabólico sonido. Música hubo y mucha, y demasiado buena y revolucionaria como para ignorarla en favor del sensacionalismo.

El black metal fue (y en algunos caso sigue siendo) un movimiento cultural con todas las deformaciones que quieras, pero de una energia creativa tremenda, y una raigambre nórdica inimitable. Música poderosa, libre, al margen de modas, surgida de la oscuridad, la soledad y la naturaleza propia de un país, y de las contradicciones y la energia de la juventud. Como ocurre con la mejor música, claro.

martes, diciembre 03, 2013

MONSTER MAGNET: "LAST PATROL" (2013)


Hay una fe, una energia, una convicción en todos nosotros, un camino, un instinto.

A veces perdemos, nos vamos yendo, nos difuminamos, dejamos de respirar y el alma se deshincha, se reblandecen los sentidos, la agudeza. Pero si sabemos superar esos momentos (algunos saben sortearlos, otros nos damos de bruces contra la pared, pam, pam, y pasa mucho tiempo hasta que nos damos cuenta de que nos sangra la cabeza), hay premio, hay victoria. Me alegro de que ahora a Dave Wyndorf le toque ganar. Después de años de dudas, de desintoxcaciones, de vacilaciones (aunque Monster Magnet jamás han publicado un mal disco), es el momento de crecer. Last Patrol es el disco encargado de devolverme la fe, de meterme a empujones en la actualidad musical. Aunque solo sea para engañarme y pensar que hay más discos como este. No los hay.

Monster Magnet han firmado una obra soberbia, imperial desde el primer tema (I live behind the clouds es un despegue acojonante), los diez minutos del siguiente, un nuevo Space Truckin´ para el siglo XXI, hasta la última costilla sideral de una maquina de canciones altiva, brutal y ensimismada en la contemplación, el espacio y los agujeros negros; el rock´n roll tal y como yo lo entiendo, y su puta madre.