sábado, enero 30, 2010

THE BREW: "A MILLION DEAD STARS"


"Power trio" son dos palabras que ya ponen cachondo al rockero de pro. Por tanto, me acerco confiado al nuevo disco de The Brew (ingleses) y a los pocos minutos estos tres me han dejado arañazos por todo el cuerpo. El sonido es sólido como un roble, no se pasan con la tralla y tienen un gusto rockero que huele a viejos vinilos de Cream y a pringosas barras de bar. La intro y posterior desarrollo de Just another night son un paraíso, tíos, y luego son capaces de desdoblarse en ocho minutos de sensibilidad con el tema Kam. Y son grandes músicos (echad un vistazo a su versión del Little wing en Youtube), saben lo que hacen. Habrá que investigar en su anterior lanzamiento, The Joker, y habrá que ir a verles, porque vienen de gira.

jueves, enero 28, 2010

EL BULLI CIERRA

El nuevo Bulli ya no será un restaurante, dice Ferrán Adrià, después de haber anunciado en Madrid que en 2012 cerrará por dos años las puertas del restaurante más importante de la historia. La mayoría aplaude la decisión como un nuevo gesto genial, quizás tenga algo de esto, y un poco de intuír que si no viraban ahora, la fórmula se les comería, a Adrià y su equipo, y que había que parar (la presión debe ser inimaginable) y reconvertirse en otra cosa para que todo siga teniendo sentido y el camino siga siendo cuesta arriba, que es como debe ser. La noticia merece estar en boca de todos, porque aunque no hayas ido a comer al Bulli, seguro que habrás comido en restaurantes influenciados por Adrià. Él ha cambiado la gastronomía a nivel mundial, no se come igual ahora que hace quince años, ha revolucionado la estética, el sabor, la filosofía, la tecnología y el marketing del comer. No se me dan bien las grandes frases como la que diré, pero creo que Ferrán Adrià es el artista más decisivo socialmente de las últimas décadas. Ahora dice que para y que el Bulli volverá transformado en algo complétamente distinto, el mundo esperará impaciente, presto a saturar la centralita de reservas.

lunes, enero 25, 2010

INFORME SCORPIONS


Leo en blogs amigos e incluso en diarios a nivel nacional, que los Scorpions acaban de anunciar que su próximo disco y tour serán los últimos. Los Scorpions se jubilan. Me producen nulas sensaciones este tipo de noticias. Kiss anunciaron que se iban en el 2000 y mintieron como bellacos, tan solo querían girar por última vez con Ace y Peter (que terminaban contrato) estirando lo máximo el hype de la reunión del 96 y llenando pabellones de nuevo, después del fiasco del tour 3D del Psycho Circus. Lo de los Scorpions me suena a lo mismo, quieren marcarse unas buenas ventas para su próximo disco, y asegurarse 2-3 años de giras con éxito de público; mientras, fans del pasado y del presente iremos a verles con el corazón en un puño, pensando que será la última vez. Pero dudo que lo sea, no lo será. Y si lo es no pasa nada, para cuando terminen esta próxima gira, año 2012 o así, Klaus Meine tendrá 64-65 años, y poco futuro le quedará a la banda, qué más da entonces si lo anuncian ahora o de aquí tres o cuatro años, es una simple cuestión de marketing. Así, se trata de un nuevo disco y un nuevo tour de los Scorpions, solo que con el eslogan de ser el último, lo que les permite una mayor presencia mediática (ayer salían en la edición digital de El País, no está nada mal) y un mayor volumen de negocio.


(En otros planetas: Rusia, India... los Scorps siguen siendo reyes)

En otro orden de cosas, su próximo disco, seguro, estará bien si sigue la línea del Humanity: Hour 1, y la gira igual. Scorpions son unos profesionales, o como esos viejos Land Rover que siempre rinden; Rudolph Schenker, Klaus Meine y Mathias Jabs, la vieja guardia, son funcionarios del rock, y lo harán igual de bien en un gran festival tipo Wacken que en tu fiesta de cumpleaños si es que les llamas. La banda además, tiene a la batería a un mamut llamado James Kotak, que les empuja como un tanque en cada actuación y resulta además visualmente espectacular; el bajista es una especie de tarugo que no sé ni como se llama. Son un bloque compacto y sin fisuras, tienen su público y su nicho en el mercado. Trabajo y sueldo fijo, como digo, funcionarios del rock.


(A estos en mi ciudad los llevarían a un centro social. Época Tokyo Tapes)

Mirando al pasado, los Scorps pueden estar satisfechos. Su carrera ha jugado siempre con el fracaso más absoluto. Reconozcámoslo, los Scorps la han cagado tantas veces que ya son entrañables. Empezaron en los 70, dominados por el misticismo de Uli Jon Roth, guitarrista nacido de una cópula interplanetaria entre Rick Wakeman y Jimi Hendrix, y sus primeros triunfos se dieron en Japón, donde grabaron el imprescindible directo Tokyo Tapes. Con la marcha de Roth, llegó Mathias Jabs, atractivo y dinámico, simplón en comparación al empanado guitarrista saliente, y Scorpions decidieron lavarse la cara, tirar su ropa de la tribu de los Brady, vestirse con tachuelas y cueros y entraron en los 80 facturando el mejor heavy metal FM que hayas escuchado en tu vida: Lovedrive, Blackout y sobretodo Love at first sting les hicieron ricos y famosos y les permitieron pasárselo en grande durante casi toda la década de los 80. Disfrutaron al máximo de su momento, las limusinas iban de culo para pillarlos en cada concierto, volaba el champagne y las tías, pero con el perfecto directo World wide live se terminó lo bueno. Entonces llegó la fase oscura, a cada paso que dieron, batacazo, y así durante 20 años.


(Standing on top of the world... Época World wide live)

Del 84, año de Love at first sting, al 88 en que editaron el siguiente álbum en estudio, Savage amusement, los Scorps no hicieron nada que no fuera girar por medio mundo y columpiarse en su fama y su estrellato, sobretodo en USA, donde temas como Rock you like a hurricane sonaban a todas horas en la radio; pero pasó demasiado tiempo entre disco y disco, y para cuando editaron Savage amusement, la chispa se había ido a la mierda. Quisieron hacer un heavy de látex, comercial en grado obsesivo, pero los temas eran malos y se habían convertido en unos horteras. A partir de ahí, entendieron que para permanecer en el negocio tendrían que tocar Still loving you y Big city nights hasta la náusea. Su gira del 88 fue espectacular, sus montajes eran mastodónticos, pero detrás no había nada, incluso el álbum que los reflotó, Crazy nights, con la balada homérica Wind of change, era en verdad, un álbum muy, muy justito.


(Scorpions '88. La laca les trepanó el cerebro)

Luego vino, en el 93, Face the Heat, un buen disco que no interesó a nadie, por más que intentaron endurecerse sin perder su estilo, con temas como Alien nation o No pain no gain, pero estaban en caída lenta y progresiva. El resto de los 90 no hicieron más que vivir de rentas y cagarla una y otra vez: discos como Pure Instinct o Eye to eye son de lo peor grabado jamás por un grupo de seres humanos, y luego vinieron los unplugged, los discos sinfónicos y giras y más giras soltando los hits de siempre. Años atrás, llenaban durante varias noches el Forum de Los Ángeles, ahora daban con sus huesos en Guadalajara o Badajoz. Así es la vida. Hemos tenido que esperar hasta Unbreakable, del 2004, y el citado Humanity para que escucháramos nuevas canciones más o menos decentes de los Scorps. Han sobrevivido al fin a su propia incompetencia y a la nula capacidad creativa que mostraron a partir del 84. Se han apuntado a todos los carros posibles para seguir en la brecha (repito: sinfónicos, acústicos, baladas y más baladas, colaboraciones con Pavarotti etc. etc.), y lo han hecho tan mal que es un milagro que sigan ahí. Ahora dicen que se van, yo no les creo, pero les iré a ver en la próxima ocasión. Con todo lo malos que han llegado a ser, son una de las bandas de mi vida.

LA CINTA BLANCA (MICHAEL HANEKE)


Michael Haneke vuelve a filmar secamente, sin piedad, en blanco y negro y sin música, la violencia del ser humano en sociedad. Esta vez en un pueblo de la Alemania inmediátamente anterior al estallido de la Primera Guerra Mundial. El director de Caché nos muestra el interior de la vida de diversas familias del pueblo, fieles protestantes de purísimas costumbres y rectitud, que sin saberlo, están sembrando la semilla del odio en sus hijos. Porque la sociedad pura y los buenos valores, impuestos a la fuerza, engendran todo lo contrario, ira y venganza. Pasé los 144 minutos de película en estado de tensión, en cada escena parece que alguien vaya a cometer una locura, los personajes viven tan oprimidos en ese ambiente limpio, de tan austera y rancia bondad, que piensas que alguien, en algún momento se hartará y la emprenderá a machetazos con el resto. La escena en la que un padre machaca a su hijo a ostias porque este no quiere decirle donde esconde una flauta que ha robado a otro niño es un ejemplo de la violencia (y de como esta engendra más violencia) que esconde La Cinta Blanca. El padre no encuentra la flauta, y sale de la habitación dejando a su hijo tendido en el suelo. Al bajar las escaleras escucha el sonido de una flauta proviniente del piso de arriba. Es la respuesta de su hijo a la paliza que acaba de recibir. No sé si esta es la mejor película de Michael Haneke pero, seguro, se le acerca.

sábado, enero 23, 2010

WILLY DeVILLE: "PISTOLA" (2008)


Llego tarde al luto por la muerte de Willy DeVille en agosto del año pasado, y lo hago con su último cd en vida, del 2008, Pistola. El blues rock raspado y arrastrado del primer tema, So real, ya te acaricia como la botella en un mal día. Sé que los últimos años de Willy DeVille no fueron los mejores, el viejo pirata llevaba demasiado tiempo pagando deudas por las mil malas vidas que había vivido, y el pozo creativo se iba secando, pero quién puede dejar de emocionarse con temas del calado de When I get home o la entrañable Louise, que podría haber firmado Townes van Zandt. Ahora este disco no deja de sonar en casa, y me da la excusa para bucear de una vez y como dios manda en la discografía de DeVille, y a él, seguro, Pistola le dio la oportunidad de despedirse de este mundo con unas bonitas canciones.

jueves, enero 21, 2010

GRATEFUL DEAD EN LAS AULAS


Uno de los pequeños placeres que tengo durante las clases es poner música de fondo mientras los niños trabajan. Si el ambiente es propicio y hay tranquilidad, conecto con www.gdradio.net, una de las emisoras que emiten conciertos de los Grateful Dead 24 horas al día. Los chavales van haciendo con sus ordenadores, sus cámaras o lo que sea que tengan que hacer, y yo conecto con la radio y pienso, mira, ahora están con un concierto de la gira del 77, genial, y sutilmente, por los altavoces del aula empieza a sonar Sugar magnolia o St. Stephen, incluso esos solos de batería de veinte minutos clásicos de los Dead. Se trata de educar en todo ¿no? pues eduquemos el oído también. Al principio algunos niños preguntaban qué era eso, o formulaban alguna petición, Shakira, Macedonia... Pero ahora supongo que ya saben lo que toca. Si se portan mal me enfado, si se portan bien, Grateful Dead. Puedo decir sin temor a equivocarme que no hay ningún profesor en el país que de clases al ritmo de la guitarra de Jerry Garcia.

martes, enero 19, 2010

FRANÇOISE HARDY


Se reedita en estos días un nuevo recopilatorio de los primeros años de la carrera de Françoise Hardy, swingin´ sixties, la época Vogue. Supongo que se parecerá al gastadísimo doble cd que tengo yo, The Vogue Years. En todo caso, gran noticia. Para entendernos, hace poco escribí sobre Chet Baker y pensaba, este tipo es el hombre más atractivo que ha pisado el planeta, y lo mismo me pasa ahora con Françoise Hardy. Esta chica era el sueño inalcanzable de miles de hombres y mujeres en los sesenta. Inteligente, con talento, joven, cool, misteriosa e irrealmente bella. Su carrera empezó a principios de década, con un éxito que la ha perseguido hasta nuestros días, la universal Tout les garçons et les filles.


Pero profundizando en esa época, te das cuenta de que esta jovencísima francesita no tenía suficiente con ser una monísima fábrica de hits (pero qué hits, preciosa música: Le temps de l'amour, Je pense à lui...) , y pronto se labró una discografía de personales obras (tengo un sedoso disco del 73, Message Personnel, que me encanta), evocadoras y complejas. Incluso sus últimos discos (ese Le danger del 96) tienen una negrura y un misterio que todavía seduce. Françoise Hardy lo tiene todo. En aquellos 60 en los que reinó con su clase y su belleza, se codeó con la realeza pop de Londres, los Stones incluídos, fue icono de una época, participó en Eurovisión y vendió millones de copias sin perder un gramo de personalidad. Resumiendo, se trata de una mujer capaz de dedicarle el título de uno de sus discos a uno de los placeres más indiscutibles de la vida: el gin tonic. Y no hace falta decir nada más.

lunes, enero 18, 2010

RESTAURANTE AL CONTADINO SOTTO LE STELLE

Lindo descubrimiento el de este domingo mediodía. Después de pasearnos por la pequeña pero agradable feria del disco de Sants pensábamos en ir a algún italiano que estuviera bien, algo que no conociéramos, y lo encontramos. Un local pequeño y acogedor cerca de Lesseps, fuera lloviendo y dentro un ambiente recogido y tranquilo, y una carta donde todo son elaboraciones caseras, pasta buenísima (deliciosos orechiette con salsa de pimiento rojo, por ejemplo), una perfecta focaccia de aperitivo, aceitosa y esponjosa, o el antipasti de entrante, con embutido, parmesano, cebollitas, berenjena aliñada etc. Pedimos cerveza italiana solo sentarnos en la mesa. Al Contadino es un restaurante muy familiar, no es caro, y todo va a un ritmo sereno y sin excesos, no se pasan en nada, incluso el vino italiano de la casa es recomendable y no duele a los riñones. Se está muy bien en Al Contadino, mucho mejor que en italianos de renombre pero anticuados como Il Buono Amici. Es fácil cogerle cariño. Volveremos.

domingo, enero 17, 2010

BARCELONA 2022

Naturalmente que es ridículo que Barcelona presente candidatura para los Juegos Olímpicos de Invierno del 2022. Personalmente opino que los deportes invernales como el esquí deberían eliminarse de la legalidad vigente, y dejar las montañas tranquilas de cemento, especulación y anoraks de colorines; pero eso es solo mi parecer, la realidad objetiva es que el alcalde de Barcelona la ha liado parda por motivos electoralistas. Ha presentado candidatura sin consensuar con los demás partidos, ni con los de su propio partido, se ha lanzado a la piscina cuando al ciudadano le importa un carajo lo que suceda en el 2022, porque estamos hartos de proyectos faraónicos, de mirar al horizonte y no ver por dónde pisamos (el patético Forum 2004 -un negocio inmobiliario a gran escala disfrazado de macro exposición planetaria de buen rollete- ha provocado innumerables traumas) y queremos que se ocupen de la ciudad de una vez. La falta de imaginación del alcalde Hereu es notable, ¿la solución a nuestros problemas? Olimpiadas 2022 oigan. Proclamo ahora mismo que no quiero que mi ciudad salga elegida, e invito a que, con nuestro voto, echemos de una vez a un Ayuntamiento que no ha variado desde hace décadas y que se arrastra como las larvas buscando excusas para desviar la atención de lo que verdaderamente importa. Quiero resolver problemas: la situación de la inmigración, la falta de plazas en las guarderias, la suciedad y el turismo cutre, la inseguridad, la pérdida de la identidad de Barcelona. Etcétera. Eso es lo que importa, y a los esquiadores que les zurzan.

sábado, enero 16, 2010

RICHARD HAWLEY: "TRUELOVE´S GUTTER"


Hay estados de ánimo que, por negativos que parezcan, no deben ser curados, sino mimados. A veces no te apetece transformar tu pequeño día nublado en una fiesta, a veces no quieres que salga el sol. No tiene porque haber razones concretas detrás de un día así, a veces son pequeños detalles que te ofuscan, y aunque durante el día hagas las cosas que normalmente haces, por dentro te sientes raro, y es curioso como muchos lo notan aunque no te digan nada. A lo que voy, para dar punto y final una jornada de esa clase, nada mejor que tener en casa el nuevo disco de Richard Hawley y disfrutar de la perfecta tristeza de su música. Mañana, te prometes, ya saldrá el sol, pero ahora es bonito embadurnarte en el suave desánimo de estas canciones. Lady´s Bridge, el último disco de Hawley, me cargó, no sentí lo mismo que con el precioso Coles Corner, o el Late night final del 2001. Ahora, con Truelove´s gutter todo vuelve a su sitio, escucho temas como Ashes on the fire y me siento como en mi propio club. Ojalá siempre tengamos un nuevo disco de Richard Hawley para días así.

jueves, enero 14, 2010

MUERE JAY REATARD


Me acabo de enterar de la reciente muerte de Jay Reatard. Todavía no se saben las causas, al parecer sucedió mientras dormía la noche del martes. Tan joven, 29 años, y con tantas cosas que decir. Su último disco Watch me fall es trepidante y es capaz de hacerte hervir la sangre en unos tiempos en los que todo invita a bajar la cabeza y verlas venir. El día de navidad también murió Vic Chesnutt. Es tan horrible que la gente muera antes de hora.

HAITÍ

Postear cualquier cosa es ahora mismo una estupidez con la inimaginable tragedia que se vive en Haití. Si quereis más pruebas de que dios no existe (o es un cabrón hijo de puta, vaya) ahí están esos más de cien mil muertos, y los millones de vidas destrozadas. Enviemos dinero, deseos, pensamientos, a esa gente. No hay derecho que el mismo terremoto hubiera causado en Japón unos daños mínimos, mientras que en Haití ha sido una tragedia inconcedible, incontable. Por si no tuvieran suficiente con nuestro olvido, la naturaleza también se encarga de patear a los más pobres.

miércoles, enero 13, 2010

RYAN ADAMS


Ryan Adams se despide de la recién pasada década en su web con un "What a trip!". Sí, menudo viaje se ha pegado Ryan estos últimos diez años. Ha vivido deprisa, tanto que ha pasado de ser la promesa en la que depositamos todos nuestros anhelos musicales, allá por el 2001, a aburrir hasta las ovejas. Un camino agitado por alcohol y mala vida y un montonazo de discos editados. Todo compulsivo, como le gusta a él. Recuerdo aquel concierto en Bikini, y la sensación de que con ese borrachuzo o no íbamos a ninguna parte o nos íbamos a comer el mundo. Al salir, pensé firmemente lo segundo, ese Gold, el anterior, Heartbreaker, eran perfectas medicinas, un mocoso decano del country alternativo abriéndose paso al éxito masivo. Hacía falta un Ryan Adams, pero pronto llegaron el insuficiente Demolition, los dos Love is Hell, Rock n´roll, Cold Roses... Y el problema se hacía más y más grande: primero, demasiados discos en demasiado poco tiempo, luego muchas medianías, cancioncillas sosas pero encantadas de haberse conocido, aburrimiento en baladas muy, muy facilonas, blandas, y tan solo algún tema (normalmente los que inician sus discos) por el que valga la pena limpiarte las legañas. Una pena, pronto me cansé de él, y ahora tan solo tolero alguna canción (de nuevo, las iniciales) de su última obra Cardinology. Hace diez años Ryan iba para referencia del rock contemporáneo auténtico, pero otros como Jack White se le adelantaron. Lástima.

lunes, enero 11, 2010

"UN TIPO SERIO"


Aunque la película a veces no sabes hacia dónde va, la galería de personajes, los silencios, las situaciones con ese toque surrealista coheniano, que no da risa pero es jodídamente divertido, y sobretodo, esa irreverente bisturí que aplican al mundo judío y que no deja títere con cabeza, por todo eso y más, Un tipo serio es una de las obras que más me han convencido de los hermanos Cohen. El lobby judío USA ya puede estar dándose de golpes contra la pared, porque el film los ridiculiza sin piedad. Un tipo serio nos cuenta la historia de un hombre normal al que todo, absolutamente todo le sale mal; miembro de la comunidad judía más ortodoxa, busca soluciones en la religión, mediante sucesivas visitas a varios rabinos, (esta es sin duda la parte más surreal del film), pero nadie le explica como lidiar con los asuntos terrenales que hacen de su vida un infierno (su mujer le deja por la cara, sus hijos lo tratan como a un mueble más, un cuñado enfermo gasta su dinero en juego, le acusan de aceptar sobornos en la escuela en la que es profesor, o en el máximo despijote, se ve obligado a pagar el funeral del amante de su mujer). Todo ocurre en uno de esos barrios made in USA que tan bien filman los Cohen, que en este film tienen la punta muy, muy afilada, hasta ese final que traerá cola, pero que a mi me encanta.

sábado, enero 09, 2010

THE CULT: "LOVE"


Hace años que The Cult se empeñan en banalizarse a si mismos. Sobre las tablas, Ian Astbury por ejemplo se ha dejado en evidencia gira tras gira: su voz no da el pego y él ni se molesta en que lo de, se le ve desinteresado y soso, y se empeña en vestir como si fuera de compras al Carrefour, nada que ver con el chamán que oficiaba ceremonias de hard rock trascendente al son de Fire woman en los 80. En estudio me despedí de ellos tras la decepción que supuso Beyond good and evil en el 2001. A todas luces, la mejor decisión que ha tomado Astbury en los últimos 15 años fue unirse a los pseudo Doors de Ray Manzarek y dar conciertos como el de Barcelona, clonando al Jim Morrison de L.A Woman. Por eso hacen bien en rentabilizar su pasado con cajas como la que dedican a Love, su segundo álbum. Siempre he amado este disco, me encanta ese sonido que después fotocopiaron Héroes del Silencio, me encanta verles en el momento previo a añadir hard rock potente a su fórmula y montarse al caballo ganador USA. En Love son británicos, y tienen el toque y la estética siniestra de la que sin embargo estaban empeñados en huír. La caja es espectacular, presentación deliciosa, cd en directo, singles, rarezas y un libreto del que sacas mucha tela de aquellos tiempos cuando se les consideraba como sucesores de Adam and the Ants. Y también es otra oportunidad de disfrutar de nuevo con Nirvana, She sells sanctuary o la perfecta Big neon glitter (jamás me canso de esa parte final con Ian repitiendo "A neon glitter!", encima del triunfante riff de un Billy Duffy en estado de gracia). Me da un síncope solo de pensar que vayan a editar en un futuro una caja similar del Sonic Temple.

jueves, enero 07, 2010

BOB DYLAN LIVE: ISIS 1975

Muchos fans sabemos que la interpretación de Isis en el primer tramo de la gira Rolling Thunder Revue de 1975 es la mejor de la carrera de Dylan. No es una idiotez, por eso lo repito: la interpretación de Isis en 1975 es la mejor. La gira Rolling Thunder era un circo donde todo era loco, etílico y fugaz. Dylan estaba al límite cada noche. Su cara pintada cual clown, desbordándose a si mismo en A hard rain, Hattie Carroll, Hurricane y tantas otras, haciendo crecer a una banda de gitanos errantes, con esa mágica Scarlet Rivera al violín, Mick Ronson, T-Bone Burnett... No sé lo que es, pero todo en esa gira era nuevo y vanguardista, y era el Dylan más desfasado, confiado y ciego de autoestima que he visto nunca. Mirad y escuchad esta Isis, cómo los miembros de la banda parecen flotar en otro planeta ¡están poseídos! cómo canta -escupe- Dylan y cómo la canción explota en sus partes instrumentales. Miradle mover las manos, sus ojos y cómo toca la armónica fuera del micro. Rock n´roll ¿no? Es la mejor interpretación de su carrera claro, y en concreto, muchos fans de Dylan sabemos que el momento cuando Dylan canta "She said where you´ve been / I said no place special / She said you look different / I said well, I guess / She said you´ve been gone / I said that´s only natural / She said you´re gonna stay? / I said if you want me to... YESSSSSS!", ese "YES" es el momento por el que pagaríamos lo impagable, dos segundos de gloria bendita que dan sentido y luz a la vida: YESSSSSSS!

miércoles, enero 06, 2010

"LET´S GET LOST" & CHET BAKER


Hay cosas que solo el cine en blanco y negro puede mostrar. Verdades como las que se leen en la trágica caligrafía del rostro de Chet Baker a sus casi 60 años. Su historia, la de un superdotado trompetista que irrumpió en los cincuenta y se convirtió en mito del jazz y, también, en el icono de la década junto a James Dean y Elvis, para luego hundirse en la heroína y la fractura vital a partir de los 60. Todo está en esas arrugas infinitas, amargas y negras. El Chet Baker que vemos en este clásico documental de Bruce Weber filmado en 1987, un año antes de su muerte, es la figura del ángel herido que ya no volverá a alzarse. A sus 58 años, su trompeta, como su voz, seguían sedando el alma, pero la mirada, los párpados que parece vayan a cerrarse en cualquier instante, el cansancio vital, todo sonaba a que Chet no estaría en este mundo por mucho más tiempo, como desgraciadamente así fue. Bruce Weber filmó este presente de forma magistral, vemos a Chet Baker improvisando en la azotea de un hotel de Los Ángeles, acurrucado en la parte de atrás de un descapotable, anciano, triste, pero siempre con una mirada brillante que te recuerda que treinta años atrás, este hombre tenía toda la vida y el éxito dispuestos ahí delante, para comérselos a bocados.


Let´s get lost es un film amargo, Bruce Weber consiguió acceder hasta el fondo de la intimidad de Chet Baker, para a partir de ahí explicarnos quién fue y, sin embargo, quién es ahora. Es un film duro de ver, no es fácil entrar en espiral desde la imagen que uno tiene del Chet Baker joven, uno de los hombres más atractivos que haya pisado el planeta, e ir pasando por su larga decadencia hasta los 80, pero Chet Baker vivió la vida que quiso y pagó cristianamente su precio, cada día hasta su muerte. Y también hay música maravillosa y auténtico cine documental. Este triple DVD de Let´s get lost hace justicia a un film mítico, a su protagonista, y ha sido un precioso regalo de reyes.

martes, enero 05, 2010

MARINA D´OR

Ayer llovió durante casi todo el trayecto de regreso a Barcelona, agua en el cielo y en la autopista. Cuando pasábamos por Oropesa teníamos ya mucha hambre y decidimos investigar a ver si encontrábamos algún sitio para comer. Total que acabamos dándonos un garbeo por Marina d'Or. Yo soy fan de Marina d´Or, jamás pasaría un día allí, odio ese concepto vertical y destructivo del ocio, me parece cutre, hortera, lamentable, whatever. Por eso soy fan. Lo que vimos ayer es la otra cara de los ya de por si siniestros anuncios de "balnearios de agua salada" a los que pone voz y rostro esa marioneta rubia de TV1 que nos tiene engañados a todos. La mega urbanización en invierno es lo más parecido a una versión benidormiana del hotel de El Resplandor, da miedo que te cagas. Lluvia y frío, nadie por las calles, inmensos bloques de cemento donde encontrabas docenas de carteles de "se vende", descampados a medio construir, un paisaje fantasma, pero ni siquiera hay fantasmas. Como digo, es la otra cara del ocio al alcance de todos que ha destrozado el paisaje y ha rebajado el criterio de la gente a límites absurdos. Pasar unos días en Marina d´Or debe ser el sueño húmedo de John Waters, pero para el españolito que se las desea para llegar a fin de mes es su condena definitiva, aunque él piense que está en un bello resort. Ahora la crisis les ha dado una colleja y el complejo está empezando a decaer, rebajan precios, expectativas y dan más mierda de la que daban al principio. Algún día llegará la suspensión de pagos, los turistas huirán y Marina d´Or se convertirá en un desierto de cemento todo el año, parecido a lo que vimos ayer, mientras, alguna pantalla en lo alto de uno de los edificios seguirá emitiendo los mensajes de la moza de TV1 anunciando balnearios y restaurantes self service, precios familiares y jacuzzis. Y un entrañable Wall-E recorrerá las aceras flanqueadas por palmeras secas recogiendo la basura que una vez sembraron los que han vendido, para siempre, paisaje e ilusión.

sábado, enero 02, 2010

ROSANNE CASH: "THE LIST" (2009)


"The lights in the harbor don´t shine for me, I´m like a lost ship adrift on the sea". Solo con escuchar estos primeros versos de Sea of heartbreak, ya me pongo de buen humor. Qué canción tan bonita, como todas las joyas que Rosanne Cash versiona (con la ayuda de Springsteen y Jeff Tweedy entre otros) en The List. La historia muchos ya la conocereis, Johnny Cash le regaló a su hija Rosanne cuando ella contaba con 18 años, una lista con los 100 temas que él consideraba que su hija debía conocer. Las tablas de la ley de la música norteamericana según the man in black. Más de treinta años después, Rosanne ha escogido 12 canciones de esa lista y las ha grabado como quién amasa la pasta y fabrica deliciosas cookies navideñas siguiendo una secreta y antigua receta. Hay tanto cariño en estas interpretaciones, y nada es impostado, Rosanne no dramatiza en exceso ni trata de retorcer los originales para crear algo nuevo. Aquí tan solo hay respeto y buen gusto, paciencia y amor. He citado Sea of heartbreak, en la que pone la voz bruce Springsteen, pero Motherless children es una delicia, o Bury me under the weeping willow... Tú eliges la cookie que más te gusta.