viernes, marzo 22, 2013

MI CREATIVIDAD

Con el tiempo he comprendido que la creatividad, mi creatividad, estaba ligada al hecho de creer. Aprender a creer en cosas, en personas, en canciones, o en mi mismo, es ya de por si un hecho creativo. Creer es crear. Si crees en algo, tu misma existencia ya es creativa. He aprendido que crear no era un ideal, una meta, sino un camino que, con suerte, vas adornando con cuentos, guiones, artículos, canciones y relatos. Estudiamos demasiado a los creadores exitosos, tanto que solo pensamos en el cuadro final, o en la recaudación, o en los premios. Pero crear, para mi, ahora, es vivir la vida conectado a algo que es más grande que uno mismo, es el caudal de las ideas, de las emociones, al que todos podemos conectarnos, y del que, desgraciadamente, nos desconectamos cuando cedemos terreno al desánimo, al dolor y a la pereza. Luego he comprendido que crear debe ser rápido, un brochazo, un golpe en la mesa, un acto imperfecto y certero que se explique por si mismo. Una divagación de más, un análisis, y el momento se esfuma y no queda nada. Trata de que en tu corazón todo tenga sentido, siente tu pulso y tu rabia y tu felicidad. Así es como yo lo hago.