sábado, agosto 29, 2009

LA CRISIS Y EL ABANDONO DE ANIMALES

En La Vanguardia de hace unos pocos días dedicaban tres páginas a contar como ahora en verano hay más abandonos de animales que nunca, y que eso se debe a la crisis. Al parecer, leía, hay familias que no tienen dinero para comprar el pienso del perro, y por eso lo abandonan; textualmente, entre otras cosas, recuerdo una frase del artículo: "detrás de cada abandono hay una historia de desesperación". No hace falta decir que si eres sensible y/o inteligente, te vienen ganas de no comprar nunca más este diario. Ahora resulta que se abandonan animales por la crisis, ya no hay desidia, ni falta de humanidad, ni egoísmo (las causas únicas que hacen que un ser humano abra la puerta del coche y deje tirado al perro en medio de un camino), ahora la crisis tiene la culpa, las familias, pobres familias, no tienen ni para el pienso, y qué van a hacer pues, sino dejar tirado al perro y al gato e irse de vacaciones. El problema de este país donde se acaba de decidir que el gobierno premiará -todavía más- a quién no busque trabajo (mucha, muchísima gente en paro, sobre todo jóvenes, lo están porque les da la gana, y no gastan ni un minuto en buscarse un curro: me tomo un año sabático, ya cobraré del paro etc. etc.), de modo que cuando se te agote la prestación por desempleo te regalarán otro sueldo de más de 400 euros, viva Zapatero, el problema de este país, digo, es que ya ni nos esforzamos en buscar soluciones a nuestra desesperación, si no tenemos trabajo es la crisis, si no hemos ahorrado como debíamos, si nos hemos embarcado en créditos que ahora no podemos pagar es la crisis, y en el colmo del cinismo nacional, si abandonamos a nuestras mascotas, lo hacemos por la crisis.