miércoles, febrero 03, 2010

PSEUDOSKINS

Yo era adolescente cuando la moda skin estaba en pleno auge. Estudiaba en un colegio de la zona alta de Barcelona, donde la plaga rapadilla se extendía como la peste. La cabeza afeitada, las Bomber y las jodidas Martens de punta de hierro eran las insignias de este tipo de pijos idiotas que, para mi sorpresa, se llevaban todos los halagos y las miradas de las chicas. No entendía como ellas podían hablar, jiji jaja, con un pseudoskin famoso por haber ostiado a algún otro pijo, o ni siquiera eso, un pseudoskin que lo era porque otros lo eran, o peor todavía, esos anormales que se enzarzaban en discusiones sobre las virtudes Hitler y que al llegar a casa se quitaban la Bomber y se iban a jugar al Tenis Barcelona de Pedralbes; quiero decir, yo era un gafotas que escuchaba a Neil Young, me dejaba crecer el pelo hasta donde me dejaban mis padres y no llevaba Bomber, pero tampoco estaba tan mal... Recuerdo todo eso ahora que los mossos acaban de detener a algunos rapados Boixos Nois, aquellos que amenazaron de muerte a Laporta, y que este, en un gesto inédito en el mundo del fútbol (donde en el 99% de los casos, las directivas de los clubes contemporizan con las hinchadas violentas), echó a patadas del Nou Camp. Supongo que en este caso hablamos de gente de la peor calaña, nada que ver con la mayoría de skinetes que poblaron mi adolescencia, aunque a algunos, desde luego, les habrían ido bien unas cuantas semanas en un puto centro de menores.