jueves, diciembre 31, 2009
"BUSCANDO A ERIC"
Hay que tener fe. Los cuentos de navidad existen, y Capra y Dickens no estaban equivocados. Hay que tener fe en estas fechas, aunque apesten. Buscando a Eric es el cuento perfecto para empezar el nuevo año ya no con optimismo, sino con la fuerza a punto de estallar, la urgente determinación que siempre exhibió (y exhibe) Eric Cantona, el fantasma bueno de este cuento, que ilumina y enseña al cartero protagonista del film (al estilo de Sueños de un Seductor) interpretado por Steve Evets, el clásico obrero inglés de Ken Loach jodido por la puta vida. Buscando a Eric es necesariamente dulzona en su tramo final, y fijo que habrá quienes echen de menos al Ken Loach más inclemente, pero a mi me gusta así, de otro modo no lo vería como un bonito cuento de navidad. Me gusta como estos hooligans de tres al cuarto, barrigudos de clase baja, resuelven sus problemas y acaban abrazados, sonrientes y queriéndose. Todos han aprendido una lección y tú también, y mientras hacen vía para el pub más cercano, el fantasma de Eric Cantona les guiña el ojo, orgulloso. Feliz año nuevo a todos.
martes, diciembre 29, 2009
RESTAURANTE LAS REJAS
sábado, diciembre 26, 2009
COSAS CONTRA LAS QUE NO PUEDO LUCHAR
jueves, diciembre 24, 2009
MIS DIEZ DISCOS DEL AÑO (PARTE 1)
Como digo, no hay orden en mi elección, son los diez que más me gustan. Este post con cinco, el siguiente con los restantes. A jugar.
Empiezo por ALICE IN CHAINS y su "BLACK GIVE WAY TO BLUE", que me dejó sin habla desde el primer aperitivo en Spotify. Han renacido con orgullo, retomando el sonido de Dirt y todos los tics que tanto amamos (dobles voces Jerry Cantrell y el nuevo vocalista William DuVall, pasajes enfermizos, baladas acústicas oscuras, muro de sonido...). Se han copiado a si mismos y les ha salido el disco que debería haber llegado después del perro con tres patas. Es el disco menos original del año, pero en el rock la originalidad ya se puede ir a tomar por culo. A los matados que exigen originalidad y modernez en cada lanzamineto de tal o cual banda, yo les respondo a ostia limpia con Check my brain, el single más rotundo del año. Alice in Chains han vuelto, y cuentan con mi voto. California, fine, somebody check my brain.
Lo de KISS y "SONIC BOOM" es otro retorno inesperado y feliz. Como tantos otros mortales, no daba un duro por ellos creativamente, y esperaba otro Psycho Circus, es decir nada, un disco de rock bombástico de marca blanca, igual de interesante que un yogur del Lidl, para olvidar vamos. Pero Sonic Boom es lo mejor que ha grabado Kiss desde... ¿Creatures of the night del 82? Y eso en parte gracias a que los odiados Eric Singer y Tommy Thayer han impuesto su calidad como músicos (y por favor, creo que merecen que dejemos de llamarles mercenarios), y en parte debido a que algún click ha debido de haber en la mente de Gene y Paul para que el milagro haya obrado, y los panes y los peces se hayan multiplicado. Los dos se han subido a la máquina del tiempo y han ido recogiendo lo mejor de cada etapa de su pasado, el dinamismo y corpulencia del heavy que hacían en los 80 por un lado, y por otro el espíritu de Rock n´roll Over, esos 70 que siempre querían recuperar y nunca sabían como. Ahora por fin se han olvidado del hype, de apuntarse a los sonidos de moda, y símplemente han grabado lo que les pedían los fans desde el Pleistoceno: rock n´roll. Solo porque esa ostra recauchutada llamada Gene Simmons componga un tema ya clásico y necesario en nuestras vidas como Russian Roulette, y que él mismo se digne a tocar ese bajo libidinoso que tanto echábamos de menos, es ya motivo suficiente para levantar el puño con ellos. La sorpresa de la década.
JOE HENRY es un genio, y "BLOOD FROM STARS" es el disco con el que me he sentido más en sintonía espiritual este año. Hay magia y humo en estos temas, melodías y letras enigmáticas, y un respeto reverencial de él cuando interpreta (fingido o no, qué gran actor es Joe Henry, cada una de sus canciones es una pequeña y densa obra de teatro) y respeto tuyo cuando escuchas. En Joe Henry, el respeto y las formas ante todo, baja la luz, calla y escucha. Blood From Stars es para compartirlo solo o con gente que sabe de lo que habla, hay catetos que no deben acercarse a este disco, lo contaminarían. Junto al anterior, Civilians, son dos obras maestras que ya hemos gastado los que andamos un poco hartos de ver a Tom Waits hasta en la sopa. Creo que era el amigo blogger Rockland quién destacaba el tercer tema del disco, Channel, como uno de los mejores del año, en ese momento yo tenía otros favoritos, pero ahora mismo, lo escogería como mi himno del 2009.
THE BLACK CROWES y "BEFORE THE FROST... UNTIL THE FREEZE", el doble disco con el que han aterrizado de nuevo este año, son un valor seguro. Y son clásicos, como cualquier gran banda del pasado que tengas en mente. Es insultante que se les juzgue tan fino, que críticos como Esteban Linés, de La Vanguardia, se los despachen con esa sorna de mierda, como si hacer el rock que hacen ellos fuera de segunda división. Pero todos sabemos donde juegan los Robinson y la nueva slide que les cubre ahora las espaldas, nada menos que Luther Dickinson. Good Morning Captain hará que levantes el culo del sofá y que la luz entre en tu vida, pero para cuando caiga la tarde no te olvides de Appaloosa, preciosa balada. Siguen tocando de forma tan personal, y Chris Robinson destila la misma fuerza, repito, la misma luz, que cuando era joven, pero con una diferencia: ahora la música que suena es mucho mejor. Los ingredientes son los de siempre, pero solo ellos son capaces de hacerlo así, y encima grabar el disco en directo delante de público.
Hablando del slide de Luther Dickinson, me voy a otro slide, el puto mejor slide del mundo, el que sale de los dedos de un superdotado llamado Derek Trucks. El sonido de THE DEREK TRUCKS BAND (su disco de este año, ALREADY FREE) es un soul sedante, a veces ligero, pero abierto a una gran variedad de ritmos, muy original, y siempre con la correosa slide de Derek y la voz negra y felina del vocalista Mike Mattison. Verles este verano en directo fue un privilegio. Suena Sweet Inspiration, de Already Free... ¡fiesta! luego la intensa Down don´t bother me, puro sentimiento. Already Free sigue vivo en mis orejas meses después de haberlo comprado, como el anterior cd de la banda, Songlines, solo que ahora, creo que están mucho más enfocados. Son una máquina de banda, una de las agrupaciones musicales más capaces que he escuchado en mucho tiempo.
Bien, esos son cinco de mis mejores diez discos del 2009, mañana los otros cinco.
miércoles, diciembre 23, 2009
JAY REATARD: "WATCH ME FALL" (2009)
A la que te adaptas a su particular forma de cantar, el disco de Jay Reatard, Watch me fall, se abre paso como un toro en San Fermín. Los tres primeros temas, por ejemplo, son un portento. En cada uno, cohetes de dos minutos, garajeros y punzantes, Jay se inventa una melodía genial y todavía no ha terminado de cantarla que ya está con otra totalmente distinta. Si le sigues bien el ritmo, el disco es una bomba de melodía y electricidad. Man of steel, por citar uno, es traca pura, con un montón de variaciones, geniales ideas de usar y tirar e incluso una fase psicodélica recorrida a 200 km/h. Cito otro, el extraño Nothing now, que es como una resaca del Alice Cooper dadá de los primeros 80. Luego está el redondo Hang them all, otro tema con una docena de fases y locuras distintas, o la eufórica Before I was caught, loca e irresistible. Jay Reatard es como una termomix supersónica, lo mezcla todo y le sale rápido, veloz y brillante.
martes, diciembre 22, 2009
Marc Bolan The Concert Hall, Long Beach, California, 08th Oct 1974-01 Jeepster [HQ]
(Disculpad los que habeis comentado antes esta entrada, porque sin querer he eliminado vuestros comentarios)
De esta guisa salía Bolan a escena en su tour norteamericano del 74. Engordado y decadente, poco público le prestaba atención, aunque su magia seguía casi intacta. Tocaba de esa forma tan grácil, sus T-Rex, siempre adecuados al tono, con Mickey Finn, el percusionista y 50% de la imagen de la banda en los buenos tiempos, y desde 1974 con Gloria Jones, una mujer que lo daba todo en escena. Bolan ya no era el invencible fabricante de hits de antaño, pero viñendole saltar de esa estrella de carton piedra y atacar el concierto con Jeepster... dulce decadencia la suya.
(La entrada anterior también la dedico a este periodo de Bolan)
lunes, diciembre 21, 2009
MARC BOLAN & T-REX: FULGURANTE VIAJE DE LA CIMA A LA DECADENCIA
Nadie sufrió más que Marc Bolan el reverso de la fama. En los primeros setenta, hasta el 72-73, él fue el máximo fenómeno pop europeo. En su Inglaterra natal la locura por el pequeño emperador del glam de gominola fue comparable a la de los Beatles. Marc era joven, mono, y tenía una insultante seguridad en cada paso que daba, discos capitales como Electric Warrior o The Slider, conciertos extáticos (ver la reeditada Born to boogie, con Marc arrasando con Wembley), y singles que no bajaban del primer puesto. Jeepster, Life´s a gas, Metal guru, Children of the revolution... fueron la banda sonora de los adolescentes británicos que empezaban a maquillarse y a vestirse con plataformas y lentejuelas. Era la falsedad y la fiesta del glam, de la que Bolan fue pionero, principal beneficiario y más desgraciada víctima también.
(Mickey Finn, percusionista en T Rex, y Marc Bolan regalaban actitud a saco en escena)
Porque de 1973 hasta 1977, año de su muerte por accidente de coche, Marc vivió ese lado oscuro de la fama, hubo alcohol, separaciones matrimoniales, una ira que impedía un trabajo normal con él (el mítico productor Tony Visconti, responsable del sonido tan particular de T-Rex, acabó dejándolo en la estacada, no podía más con su comportamiento de estrellita malhumorada o no según le viniera en gana), hubo champagne y brandy, cocaína y un alejamiento preocupante de la realidad. Después del que quizás sea su disco culminante, The Slider, Marc entró en una imparable decadencia. Él público le dió la espalda, la crítica se reía de él, y América le ignoraba. Pero él jamás quiso enterarse.
(Para Zinc Alloy and the Hidden riders of Tomorrow, Marc se cortó el pelo, lo que provocó el enfado de sus fans, los pocos que le iban quedando. Otro disco lleno de fantasía, bisutería pop y aliento negro)
Cuando Bowie ya se había reinventado veinte veces, Marc seguía esperando que los tiempos de singles en el nº1 volvieran pronto. Mientras, bebía y comía pollo como un loco y se descuidaba de su forma física, engordando cual bolilla de grasa. Ahora, con la perspectiva del tiempo, este periodo decadente de Bolan puede valorarse de forma más positiva. Discos como Tanx, el sucesor de The Slider, Zinc Alloy and the Hidden Riders of Tomorrow, o Bolan´s Zip Gun resultan irresistibles, por más que a veces parece que Marc repita riffs y estructuras facilonas, como sacadas del congelador del Mercadona, pop precocinado industrialmente para consumo instantáneo. Son obras cerradas en si mismas, con Marc dando rienda suelta a sus letras absolútamente espaciales, y esas estructuras cada vez más minimalistas de las que hablo, y temas que componía en dos minutos y grababa en tres.
(Joya oculta, nadie se acuerda de este disco. Descúbrelo)
Pero Marc tenía el don, y escuchando ahora mismo Bolan´s Zip Gun, lo situaría a la altura de sus grandes obras. Menudo disco, original, divertido ¡bailable! y con esa influencia negra que le dió a los discos de esta época, fruto de su fascinación por la américa soul y de la influencia de su pareja de entonces, la cantante, organista y compositora Gloria Jones, que se unió a los T-Rex de Bolan y aportó coros con su increíble voz y una presencia escénica fascinante. Sin embargo, por entonces la perspectiva de aquellos años 1974-75-76 era otra. Bolan era una reliquia del pasado, le diseñaban patéticas giras por puebluchos de la costa británica, ante los cuatro fans que le quedaban, y tours de telonero por Estados Unidos, en los que el alcohol y el malhumor (incluídas peleas sonadas con Gloria Jones) le impedían ser el Bolan de antes, si bien a nadie le importaba, puesto que los pabellones todavía estaban medio vacíos cuando él y sus T-Rex salían a escena.
(A pesar de vivir en una clara pendiente artística, Gloria Jones le dió amor y alma soul a la vida y obra del último Bolan)
Nadie le respetaba ya, por más que Bolan se mostrara ante los periodistas como el mejor colega de la estrella del momento, Bowie (a quién había despreciado cuando este empezaba a despuntar y él estaba en la cima), y como un artista activo con mil proyectos de cine y música en la cabeza. Sin embargo fue la televisión la que reactivó su carrera. Los productores vieron filón en su figura carismática del pasado, y le dedicaron programas especiales como Supersonic, donde Marc cantaba sus últimos temas y algún clásico rodeado de escenografía ultra kitch.
(En la fase final de su carrera Bolan cambiaba de aspecto con frecuencia, aquí con su famosa mecha de cabello blanca)
En una de esas actuaciones, Marc apareció con el rostro pálido y el pelo al más puro estilo siniestro, cuando nadie sabía lo que eso significaba todavía. Una joven Siouxie vió su actuación y tomó nota. Bolan acababa de convertirse en padrino del punk y la estética siniestra, lo que, seguro, le llenó de orgullo. Desgraciadamente, cuando todo podía suceder en su carrera, y su creatividad podía dar aún algunas alegrías, su Mini, conducido por Gloria Jones, se estampó contra un árbol. Marc murió al instante. Pero su música no, claro, por ello recomiendo meterse a fondo y sin complejos en cualquiera de sus discos desde Electric Warrior. Es una carrera fascinante, música que salía como los algodones de azúcar en las ferias, en un plis ya tenías algo dulce y hermoso en la boca.
sábado, diciembre 19, 2009
PROHIBIRÁN LOS TOROS
miércoles, diciembre 16, 2009
EL LOTERO DE SORT
martes, diciembre 15, 2009
CA L'ESPINALER
Hay que reivnidicar la conserva. Todos en nuestras despensas guardamos conservas Dani y demás, tan viejas que los berberechos deben haber huído ya, hartos de que nadie se los coma. Pero en Ca l'Espinaler la conserva es buena, hay de todo, los mejillones saltan a la vista, las navajas, las almejas. Todo se come con la vista, además del gusto claro, y del oído, con el rumor de la gente alegre, el movimiento, el ritmo. El aperitivo de domingo es importante, tanto como para que nos desplacemos de Barcelona a Vilassar para probar delicias enlatadas. En esos instantes en que todo es ilusión, y no has entrado en la pendiente dominical que te llevará, lo quieras o no, al jodido lunes.
domingo, diciembre 13, 2009
HARTO DE QUEEN
La máquina de marketing de Queen debe ser tan perfecta que cada vez que la banda, o la empresa que lleva ese nombre, se mueve (lanzamiento de otro grandes éxitos, reedición de algún concierto, tonterías varias) la prensa especializada se hace eco dedicándoles portadas y extensos artículos. Pero la máquina está provocando que gente como yo nos bajemos del carro. Me aburre reivindicar a Queen, y hace mucho tiempo que no escucho nada suyo, a pesar de haber perdido la cabeza con ellos en muchos momentos de mi vida. Antes comulgaba con su artesanía bufa en los 70, o la locura de sus primeros discos, que me marcaron, antes vibraba con el hard rock sintetizado, grandilocuente y comercialote que dieron en los 80, pero ahora no soporto sus himnos, su pomposidad y su falsedad. Naturalmente que soy injusto, pero necesito vacaciones de Queen, dadme un respiro. Yo dejaría morir ese nombre, Queen, durante mínimo diez años, que el mundo esconda sus discos y desaparezcan del recuerdo sus últimos tiempos, con la reunión palomitera para el populacho junto a Jesús Parada, digo Paul Rodgers, y Brian May y Roger Taylor exprimiendo la vaca como cosacos. Me aburre comprar una revista con Freddie Mercury en la portada. El recuerdo de la banda, antes dulce, es ahora una obesa memoria por gracia de sus supervivientes. Dejemos a la vaca en paz. Descansa en paz, reina.
domingo, diciembre 06, 2009
BARCELONA MULTICULTURAL EN NAVIDAD
UDO (SALA SALAMANDRA, 8-XII-09)
Profeso un amor casi infantil por este hombre, Udo Dirkshneider. Accept fue una banda revolucionaria, crearon el speed metal, digámoslo bien claro, fueron visionarios, y discos como Restless & Wild pateaban el culo a lo que hacían Maiden o Judas en aquel momento, por más que amemos todo lo que fuera que estaban haciendo. Hasta Roussian Roulette, de 1986, la carrera de Accept fue coherente y casi perfecta, luego se les fue la olla y echaron a Udo, y quisieron subirse al carro comercial hard americano, con un cantante pintamonas impresentable. La banda se hundió, claro, pero para entonces Udo ya había despegado en solitario con una fórmula tan previsible como necesaria: enarbolar la bandera del sonido Accept con unos discos en solitario siempre correctos, a veces muy buenos (su debut Animal House, o Faceless World), y currárselo mucho, con humildad, con ganas de defender un legado y seguir vivo en el imperio del metal. Y así hasta ahora, con un Udo que ha tenido claro que aunque se reuniese con sus ex compañeros de Accept en un par de ocasiones (la primera en los 90, en un periodo en donde editaron tres magníficos discos), su prioridad debía ser mantener a su banda, Udo, y seguir trabajando año tras año. El concierto de ayer fue bueno, siempre son buenos los conciertos de Udo, porque lleva una banda ya bien engrasada que disfruta, sobretodo el guitarra rítmica, un feliz Stefan Kauffman, quién era el batería clásico de Accept hasta que se pasó a la guitarra. A diferencia de otras veces tocaron mucho material nuevo, de los últimos tres discos, a destacar la peciosa In the darkness, y dejaron poco espacio para Accept (solo tres o cuatro temas), y para el material antiguo de Udo (aunque me gustó escuchar Independe day). No fue una noche memorable como la última en el Apolo, que tuvo un punto de desfase que me encantó, pero estuvieron fantásticos, y terminaron rejuveneciéndose con la viejísima, incendiaria Burning, de los primeros tiempos de Accept. La sala Salamandra, tirada en alguna parte de Hospitalet, tenía buen aspecto, algún idiota iba bebido y dió el espectáculo en las primeras canciones, hasta que yo y alguno más le invitamos a que se fuera a la parte de atrás antes de que un heavy rural le partiese la cara. Hasta de aquí un par de años Udo, como siempre.
ANTES PINTABAS TORMENTAS
sábado, diciembre 05, 2009
NEIL YOUNG: "DREAMIN´ MAN LIVE 92"
Desde finales de los 80, a partir de Freedom, y poco antes, con su gira "El garaje de Neil", Neil Young recuperó credibilidad a marchas forzadas, después de años de experimentos fallidos (o no) con el tecno, el country más recalcitrante o el rockabilly. Una vez curado, salieron cosas como la decisiva tormenta eléctrica de la mano de Molina, Sanpedro y compañía, el discazo que fue Ragged Glory, pero se imponía un nuevo quiebro, y otra vez Neil desenpolvó la acústica y editó un disco perfecto, Harvest Moon, por el que he perdido la cabeza en diferentes etapas de mi vida, como me ocurrió con su hermano mayor, Harvest, uno de los diez discos más importantes del universo. Harvest Moon, de 1992, una obra a la altura de las que todos teneis en mente, punto. Ahora las Perfomance Series de Neil Young (que luchan por llevarse el record de orgasmos por minuto que ya tienen las Bootleg Series de Dylan) dedican un disco a la gira previa al lanzamiento de Harvest Moon ¿Qué encontramos aquí? Bien, un trazo delicioso, carboncillo fino y sensible sobre cartón, de los sensacionales temas de Harvest Moon (Such a woman, la inolvidable From Hank to Hendrix, One of these days...) a pelo, sin producción ni coros femeninos, harmónica y esa guitarra básica pero excelsa, en fin, Neil Young en plenitud. El solo de harmónica de Such a woman lo explica todo, aunque en cualquier rincón del disco podeis encontrar paz y amor a un precio irrisorio. Apruebo este salto de las Perfomance Series desde los inicios de la carrera en solitario de Neil hasta este precioso 1992. Quiero que estas ediciones del archico neilyoungiano me sorprendan y me caneen, quiero viajar a los extraños 80, a la plenitud Crazy Horse de Zuma, quiero parar en todas las estaciones y maravillarme. Pasaré por caja, prometido.
miércoles, diciembre 02, 2009
BOB DYLAN: "CHRISTMAS IN THE HEART" (2009)
Bob Dylan edita un disco navideño ¿qué problema hay? El recelo, la media sonrisita (ese genio loco de Dylan, jijijaja...), la injusta exigencia (aunque exigencias públicas Dylan las ha soportado desde que tenía 20 años) de reclamar otro Modern Times, como también se hizo con el anterior y fresquísimo Together trough love, son vicios de parte del público y la crítica que muchos ya pasamos por alto. Yo en este Christmas in the heart me siento como en casa, es un cuento de navidad maravilloso, con el sonido añejo que Dylan ha recreado durante esta última década, con postales tiernas en blanco y negro como I'll be home for Christmas, directas maravillas que van al corazón como Do you hear what I hear, o fiesta en la taverna con Must be Santa, donde Dylan brinda con nosotros en medio del jolgorio. Yo no le niego un brindis a Bob Dylan, porque este disco es una joya y un divertido mensaje rebosante de belleza. Él ha convivido con el cinismo y el rechazo durante toda su carrera, a cada paso que ha dado el mundo le ha mirado con desconfianza ¿será auténtico? ¿se habrá vendido? Mientras, Dylan enciende la chimenea y graba discos navideños que te reconfortan. No hay mejor respuesta que esa.
martes, diciembre 01, 2009
GUÍA MICHELÍN
viernes, noviembre 27, 2009
DIO
Los que amamos a Ronnie James Dio lo hacemos full time. Hemos entendido sus peores etapas creativas, cuando sus giras eran un carnaval de dragones de goma, espadas fosforescentes y efectos especiales de obra de los Pastorets, como aquel tour del Sacred Heart de finales de los 80, o como cuando trató de salir en la foto del metal alternativo en los 90, con Strange Highways y Angry Machines, o como cuando con Lock up the wolves, de 1990, vimos que se le iba la carrera por el retrete y todo olía a decadencia. Hemos entendido sus horas bajas porque incluso entonces nos hacía felices. Dio no es solo el cantante de los primeros Rainbow, una banda de poderes mitológicos, conciertos sobrehumanos y tres discos irrepetibles, el hombre que iniciaba conciertos a grito de "Danger, danger, the queen´s about to kill!!!", una banda que jamás me cansará, y de la que nunca tengo suficiente; tampoco es solo el Dio que consiguió adaptar a los decadentes Black Sabbath post Ozzy al heavy de los 80, en una impagable labor que hizo que la banda de Iommi pudiera seguir viva hasta hoy día, y no quedar como un resto arqueológico al estilo Uriah Heep; ni el Dio que se llevó la adolescencia de miles de heavys ansiosos de fantasía y liberación con sus discos clásicos en su propia banda, esos Holy Diver, The Last in Line... Es que Dio es como un abuelo que siempre está ahí. Yo siempre pensaba que mi yaya estaría siempre conmigo, porque nadie quiere de la forma que se quieren un nieto y su abuela, por eso, porque quiero que Dio esté siempre ahí, deseo que el cáncer de estómago que le han diagnosticado sea una simple avería, como parece que puede ser. Ha anulado sus próximso compromisos en directo, lo están cuidando, y espero que pronto vuelva para hacer lo que de le la gana, que yo estaré ahí para escucharle.
miércoles, noviembre 25, 2009
AHMADINEYAD, MORALES, CHÁVEZ
lunes, noviembre 23, 2009
NAZARETH
A veces pienso que Nazareth son tan definitorios, tan básicos y tan buenos que podrías prescindir de cualquier otra banda y quedarte solo con sus discos. Quiero decir que abarcan gran parte de las sensibilidades del rock n´roll, son una suma de las razones de ser de esta música, y por eso valen más que otras bandas con un estilo más cerrado. A un moribundo no le darías tartar de atún con helado de wasabi, le darías algo básico, un trozo de pan. Y Nazareth son ese trozo de pan. Puedes refinarte, buscar nuevos sabores, pero un jodido pan de leña sigue siendo básico. La banda creó unas cuantas obras maestras en los 70 -Razzamanazz, Rampant, Hair of the dog... recomiendo por cierto un doble disco formado por varios directos que salió allá por 2001, llamado Back to the Trenches, que es fuego puro-, y si fueron grandes es sobretodo porque eran sencillos y nada pretenciosos y por la poderosa voz de Dan McCafferty, uno de mis cinco vocalistas favoritos de la historia.
Sin embargo los 80 son su etapa oscura, como ocurre con tantas bandas clásicas. Oscura pero no mala, por eso recomiendo dar un repaso a su maravilloso disco del 81, 2XS, donde dieron con una fórmula AOR que sin embargo no era empalagosa y siguieron rindiendo como verdaderas locomotoras del rock en temas como Boys in the band, o himnos que de tan buenos parece mentira que no hayan sido hits planetarios, como Games, con un crescendo vocal de McCafferty que perforará tus oídos. 2XS es la mejor forma que ha tenido nunca una banda de rock duro de acercarse a los sonidos más suaves de la FM, lástima que no cundiera ejemplo. Por suerte Nazareth todavía viven profesionalmente hablando, y editaron un buen disco hace poco tiempo, The Newzz, aunque para nada se acerquen al nivel de este 2XS o de himnos inmortales como Alcatrazz (¿Puede haber una canción mejor que esa?).
domingo, noviembre 22, 2009
TOCAR EN UNA BANDA
viernes, noviembre 20, 2009
EL ENEMIGO SOMOS NOSOTROS
miércoles, noviembre 18, 2009
BOB DYLAN LIVE: RADIO CITY MUSIC HALL 1988.
(Paul Williams)
Es imposible entender gran parte de la trayectoria de Dylan sin bucear en su actividad sobre el escenario, sus míticas actuaciones y también sus patinazos. En mi caso, tiendo a escuchar más sus directos que sus discos en estudio, así que empiezo. Primer concierto: Radio City Music Hall, 19 de octubre de 1988.
La gira Interstate 88 consistió en 65 conciertos por todo Estados Unidos. Él último tour de Dylan había sido el extraordinario periplo europeo con Tom Petty & The Heartbreakers acompañados de las cantantes gospel Queens of Rythm. Pero para esta ocasión Dylan estaba decidido a quitar aditivos y presentarse a su público en su forma más punk. Una banda formada por bajo, guitarra y batería y un Dylan que dejó aparcada la armónica durante todo el tour fueron la nueva propuesta. Las canciones sonaron duras y secas, sin adornos ni tonterías, y Dylan consiguió meterse bastante a fondo en todos los conciertos, y así hasta llegar al final de gira en Nueva York, con tres noches consecutivas en el precioso Radio City Music Hall. Escuchando este bootleg (denominado Stuck Inside of New York) compruebas que a Dylan le falla la voz después de toda la gira, canta a veces como si se estuviera pidiendo la décima cerveza en una taberna de mala muerte, pero a cambio aporta energía y una cierta mala baba a los temas.
El concierto empieza con una sorpresa mayúscula, uno de sus temas más alocados y queridos: Subterranean Homesick Blues escupido a pelo, sin chorradas. Cada noche durante esta gira era igual, Dylan daba dos pasos al frente y vomitaba Subterranean Homesick Blues, a veces sonaba decente, normalmente resultaba caótica, pero es un inicio valiente, aquí estoy y empiezaré con mi canción más jodida de interpretar: "Johnny´s in the basement, mixing up the medicine!". Me gusta como suena John Brown, tema al que le cogió cariño durante esta época, y Stuck Inside of Mobile resucita a un muerto con esos primeros acordes que son una traca de alegría. Hay más sorpresas, la super oscura en directo Bob Dyñan´s 115th Dream, o la sección acústica que interpreta a solas con su guitarrista G.E Smith, con una versión preciosa del tradicional Barbara Allen o de uno de los temas que casi nunca canta mal: One too many mornings, además de la titánica Gates of Eden.
En 1988 Dylan no hablaba entre canción y canción (bien, pocas veces lo hace), y sus conciertos eran cortos y directos. Las guitarras iban a todo trapo y la voz desgarraba en los temas eléctricos, y las acústicas eran un remanso de paz y lugar para sorprender al público con versiones de temas tradicionales. Este concierto de Nueva York no es el mejor de la gira ni mucho menos (los primeros fueron tremendos, con Neil Young de invitado apoyando a la guitarra), pero suena de fábula, casi como un directo oficial, y yo le tengo cariño, lo escucho a menudo. En esta época, Dylan grababa discos amorfos con pocos momentos salvables (Knocked out loaded, Down in the Groove...), por lo que volcaba toda su esquiva creatividad en conciertos fogosos como este.
lunes, noviembre 16, 2009
GOV´T MULE (SALA APOLO 15-XI-09)
sábado, noviembre 14, 2009
GOV´T MULE, 2009
La suerte que hemos tenido. By a Thread es un gran disco, todos los discos tienen un clic, un momento en el que todo empieza a rular y la maquinaria se pone en marcha, y en este caso es en el tercer tema, Railroad Boy, un arreglo con letra trágica de una vieja canción que había intepretado ya gente como Joan Baez, cuando By a Thread despega a fuerza de emoción. Gov´t Mule siguen con el pulso prieto, con el pie en el freno, recreándose en estrucutras calmas, olvidándose de que hace diez años, con Blind man in the dark, podían quemar maizales a su antojo. Ahora no les hace falta, Warren Haynes ha dado con una buena fórmula para tenernos contentos, y esta es By a Thread, y lo mejor es que vienen en un gran momento en directo, con un año en el que Warren ha seguido actuando con los Allman Brothers y sobretodo, abriendo puertas del conocimiento y la alucinación con la sorprendente, inabarcable gira primaveral de The Dead, a la izquierda de Phil Lesh y Bob Weir. Tantas alegrías que nos da este hombre y ahora una más, por 22 euros puedes presenciarle en directo con el grupo que más le importa, su grupo, Gov´t Mule, en unas tres horas que este domingo prometen ser inolvidables.
jueves, noviembre 12, 2009
AEROSMITH, PRESENTE Y FUTURO
Solo un gran disco como el de Kiss redimiría a Aerosmith de tanta dejadez. Nada escuchable desde Nine Lives, y de eso hace ya más de diez años. Como toda banda grande americana, se han dedicado a girar y girar, olvidando que de vez en cuando hay que pasar por el tajo y grabar algo de música decente, que no sea un cutre disco con portada rosa o uno de versiones blues que debería haberse grabado una década antes. Los rumores sobre la marcha de Steven Tyler han corrido como la pólvora y ésta ha terminado mojada, al final parece que el bueno de Tallarico seguirá en su puesto. Siempre queda la redención, y repito, Kiss son el ejemplo de que el rock n´roll puede con nuestro cinismo de blogueros sabiondos. Solo un disco de rock n´roll devolvería a esta banda parte de la gloria que ellos mismos han dilapilado con gusto y profesionalidad. Lo demás, cambios de aspecto, cirujías, declaraciones, promesas de nuevo disco cada tres meses y caídas del escenario, todo eso, son paparruchas. Aerosmith son de las pocas bandas que pueden volver a grabar algo como lo hacían treinta años atrás, otro Rocks, menos Rocks que el original, pero Rocks. Lo malo es que quizás sea demasiado tarde. La última oleada de éxito de mediados de los 90, con las baladas y todo eso, les dejó descolocados y despersonalizados. Siguen en la inopia, pero solo ellos pueden salir de esta. Gene y Paul lo han conseguido.
miércoles, noviembre 11, 2009
Flight of the Conchords: "Business Time"
Divertidísima apropiación del lenguaje Barry White por parte de este dúo musico-televisivo de Nueva Zelanda. Sexo por un tubo, luces apagadas, susurros... business time!
lunes, noviembre 09, 2009
YNGWIE MALMSTEEN
Regodeándome en el sinsentido de mi blog, dejo el independentismo y paso a centrar mi atención en un verdadero asunto de estado: Yngwie Malmsteen. Adoro a Yngwie Malmsteen, autor de una apreciable obra guitarrística repartida en bandas reivindicables como Alcatrazz y unos discos en solitario en los que él hace y deshace. Dictador, hombre poseedor de una autoconfianza gigantesca, escribe y toca bajo y guitarras de todos su discos, desde los ágiles comienzos de Yngwie Malmsteen Rising Force, pasando por la comercialidad fofa y ameba de Eclipse, de 1990, experimentos curiosos con orquestas, y terminando con sus últimas obras (Attack!, Unleash the fury...), apreciables pistas por donde sus dedos corren y corren una y otra vez, fieles a un estilo que no varía, sin importar el cantante de turno que esté en nómina. Yngwie tiene su reducto, y lo defenderá con sus huevos. Ha sobrevivido a mil modas, a sus problemas con el alcohol, a sus delirios y a su mediocridad, y seguirá bailando claqué sobre el mástil de su Strato cuando tú y yo ya no estemos aquí. Hay que tener fé en nosotros mismos, hay que creer en ti. Yngwie no es un gran compositor, es un atleta de los punteos, talento el justo. Pero a veces no ganan los mejores, a veces ganan los luchadores.
jueves, noviembre 05, 2009
CATALUNYA
miércoles, noviembre 04, 2009
En el backstage con Dylan, Waits y Popeye.
Desternillante encuentro en el backstage entre Popeye, Tom Waits, Bob Dylan y Muhamad Ali. Me encata cuando Waits dice "Christ!". Todo según el talento de Seth MacFarlane.
martes, noviembre 03, 2009
WASP: "BABYLON" (2009)
Hay que aceptar que Blackie Lawless no funciona ya con más de media neurona en las entrevistas (ahora -leyendo el Popu- dice que en Europa planean inyectar chips a la gente para controlarlos, y que Obama es un marxista mucho más diabólico que Bush. Blackie, la pastilla), pero es un placer escuchar su voz. Sigue cantando con unos huevos que tiran de espaldas, sino gozadle en una canción como Live to die another day, del disco que nos ocupa. Babylon no debería pasar tan desapercibido entre la selva de la actualidad musical, hay buenas canciones, garra, esa garra tan particular de Blackie cuando canta, y sonido WASP por un tubo. Blackie es un viejo bluesman que toca heavy metal, un perro hijoputa, sucio y rastrero, que ha cometido mil errores, y que ha vivido lo suficiente como para que todo se la traiga al pario. Está aquí, y saca un disquito cada dos años, y este último es un notable. Incluye una versión del Burn purpleliano que sobra, porque en la cabeza de uno no cabe más que Coverdale y Hughes aullando "All I hear is BUUUUURNNNN!".
domingo, noviembre 01, 2009
ALICE IN CHAINS: "BLACK GIVES WAY TO BLUE" (2009)
Cuando escuché por primera vez las canciones de Black gives way to blue decidí olvidarme de que este disco era de una banda llamada Alice in Chains en la que ya no estaba su frontman original. La música era demasiado buena como para perder el tiempo discutiendo si esto es Alice in Chains o si debería llevar otro nombre a falta de Layne Staley. Como en el sorprendente Sonic Boom de Kiss, aquí no importa si están o no todos los miembros originales, lo que cuenta es el resultado, centrémonos en la música pues. A estas alturas, todos sabemos que Check my brain es un single brutal, la canción con la que puedes caminar por la calle orgulloso de ser quién eres, mirando con desprecio a los demás transeuntes porque ellos no son como tú. Luego momentos exquisitos, ese Black gives way to blue, último tema, o el precioso Your decision, como salidos de aquellos dos discos acústicos con los que Alice in Chains nos emocionaban en los 90. Pero es el sonido y la actitud en general, desde All secrets known (un tema de "cartas sobre la mesa") hasta que termina la romería, esta música es la mejor versión de Alice in Chains que jamás hemos soñado, no llega a la tortura del disco del perro cojo, ni a la catársis yonqui de Dirt, pero los riffs blacksabbatianos, las dobles voces de William DuVall y Jerry Cantrell (que, para quién todavía no lo sabía, era y es el verdadero cerebro creativo de la banda), la seriedad, la actitud, la oscuridad y el lirismo apabullan en cada escucha. Antes de este disco no tenía razones para ir a verles en directo, ahora no lo dudaré si vuelven. Alice in Chains reivindican su derecho a existir, y nadie esperaba que lo hicieran de una forma tan bella.
sábado, octubre 31, 2009
RESTAURANT LIBENTIA
jueves, octubre 29, 2009
PALABRAS PARA BONO
martes, octubre 27, 2009
NIÑOS REBELDES
lunes, octubre 26, 2009
Alice In Chains - Bleed The Freak - Live Hollywood '92
Por lo que estoy empezando a escuchar de Black gives way to blue, Alice in Chains vuelven recogiendo los bártulos donde los habían dejado hace más de una década. Jerry Cantrell parece haber recuperado ese mal rollo elevado a trascendente y puta verdad que era su música en tiempos de Layne Staley. Este video es un recuerdo más para él, que ya no está, y para lo que llegó a significar esta banda en el pasado. Fijaros en la violencia y la lava que flotan en este video. Irrepetible. Hay veces en que te comerías el mundo y lo vomitarías hasta sacar las vísceras. Aunque para nuestro consuelo, ahora nos sobramos con este Black gives way to blue. Promete.
sábado, octubre 24, 2009
Blue Oyster Cult - (Don't Fear) The Reaper [Studio Version]
Uno de los hits ocultos de los 70. Maravillosa melodía y guitarra. Directos al cielo.
BLUE OYSTER CULT: "AGENTS OF FORTUNE" (1976)
Parece mentira que una banda como Blue Oyster Cult siga en activo. Todavía hay quién les recuerda, y ellos pueden sacarse unas perras en el Sweden Rock Festival de turno o girando por festivales de costellada en USA. En los 70, el culto de la ostra azul fue el invitado friki en el trio de reyes que formaron Zeppelin, Purple y Sabbath. Su musicalidad es despampanante, discos como Tyranny and Mutation son dignos de Alicia en el país de las Maravillas, canciones e historias en las que todo puede suceder. Como en Agents of fortune, de 1976, que abre una etapa un tanto más comercial, pero que sigue mostrándonos a una banda carnavalesca, capaz de lidiar con todo. La portada para empezar, me encanta (su mismo autor firmó la famosa ilustración del Heaven & Hell de Black Sabbath); jamás se repetirá una época como la de los 70 en la que los diseñadores (capitaneados por los de Hypgnosis) llenaban de fantasía y surrealismo las portadas de los Lp´s, ahora cuesta ver en las tiendas una portada que realmente te haga pararte a observarla.
(Eric Bloom, otro icono hortera de los 70)
Agents of fortune contiene un clásico de la banda, la preciosa y dinámica (Don´t fear) The reaper, una canción donde cada pieza encaja, armonía total; luego hay grandes temas como True Confessions o sobre todo la colaboración de Patti Smith (no fue la única que hizo en la carrera de Blue Oyster Cult) en el intenso The Revenge of Vera Gemini. Es un disco inclasificable, pero repleto de ganchos y aromas. Se mantiene fresco y en forma después de tantos años. Y se editó el año en que nací. Buena cosecha.
viernes, octubre 23, 2009
LAS MEJORES HAMBURGUESAS DE BARCELONA
jueves, octubre 22, 2009
THE DUKE & THE KING: "NOTHING GOLD CAN STAY" (2009)
Un hermanísimo de los Felice Brothers, Simone, y Robert Chicken Burke han grabado un disco bajo el nombre de The Duke & The King que, si quieres, acariciará tus oídos y calmará tu espíritu durante este otoño. Folk etéreo, volátil, y aire de soul empañando todos los temas. Hay una belleza y una sinceridad que no empalaga en canciones como If you ever get famous, mientras que Suzanne es tan delicada como un hilo de seda que se rompe con solo rozarlo. A Gene Clark le encantaría este disco. Y no me olvido del magnífico crescendo de Lose my self, mi momento favorito del álbum. Necesito esta música para trabajar con tranquilidad, para pasear al perro durante estas tardes grises, para recordar y mirar adelante, música de lluvia y frío.
martes, octubre 20, 2009
LA CUINA VERMELLA
lunes, octubre 19, 2009
LOS LÍMITES DEL CONTROL
Me parece bien que Jim Jarmush haya intentado con Los límites del control filmar su particular Esperando a Godot. No soy novato en su juego de sacarle al cine todo el drama para dejarlo hecho un (estimulante) cadáver desnudo, y desde Extraños en el paraíso, pasando por Dead man, Flores rotas... siempre me ha atraído su concepción seca y borde, y de una comicidad muy particular, de los personajes, el ritmo helado de las historias, su gusto por los momentos en los que no pasa absolútamente nada. Y como quintaesencia de ese estilo, Los límites del control gustará, por lo menos a la crítica, pero por mi parte hoy no he entrado en el juego. Digamos que se trata de una película en la que unos y otros se pasan cajetillas de cerillas, y el protagonista es un imponente tipo interpretado por el actor Isaach de Bankolé, y que está rodada en España. Más allá de esto no me he sentido atraído por el estilo Jarmush, no veía nada, ningún motivo para estar allí viendo la película, posíblemente porque el personaje protagonista tampoco parecía tener ningún motivo para estar allí, y porque los demás caracteres eran directamente ridículos, de manera intencionada claro, pero ridículos. Ha terminado la proyección y me he largado a casa sin pensar un segundo en lo que había visto.
sábado, octubre 17, 2009
BERGMAN & SARABAND
Es una película tan bella, tan sencilla. Es Bergman tal y como yo no lo veía a los veinte años, cuando creía distinguir en cada plano el origen y final de la vida. Memorable la dulzura de la pareja protagonista (ella con 63 años, él con 87), y sobretodo una bonita lección: el pasado es algo que pesa, y que debes manejar con tacto, para que no destroce tu presente. Y que hay que decidir y ser valiente, portarse bien y no dejarse los deberes por hacer.
jueves, octubre 15, 2009
"MOON"
Ya tengo ganas de volver a ver Moon, la película ganadora del festival de Sitges de este año, dirigida por Duncan Jones, "el hijo de Bowie". Me recuerda a esos episodios de The Twilight Zone en los que un hombre afrontaba su soledad en un planeta lejano o una nave espacial, y también a Solaris, de Tarkovski, y a Naves Misteriosas, mítica película de mi infancia. Moon es una historia que va descubriéndose poco a poco, de forma sorprendente hasta el dramático desenlace. Un solo actor, Sam Rockwell, que ha entendido perféctamente todos los registros de su personaje, y una cuidadísima puesta en escena, que no quiere aplastar, sino recrearse en el detalle (esos paseos lunares son una delicia para los que amamos la ciencia ficción de antes de la irrupción de los efectos digitales).
Hay en Moon una ciencia ficción minimalista pero sobretodo digna, donde los tiempos y la poética van a un ritmo que nada tiene que ver con ese género-espectáculo que de vez en cuando llena las pantallas de los multisalas. Moon está en el Verdi y el Icaria, vale la pena acercarse a verla.
martes, octubre 13, 2009
LADRILLOS EN EL PARAÍSO
lunes, octubre 12, 2009
Cheap Trick - "Miss tomorrow" (2009)
Sometidos a las estrecheces de una industria y unos oyentes que no les valoran lo suficiente, Cheap Trick están girando por USA con Def Leppard y Poison... como tercer grupo del cartel. La vida es dura para Robin Zander y compañía, pero ahí están, girando lo que pueden y grabando discos que son como ir a la tienda de golosinas. Nubes, regalices, tigretones y sugus. The Latest es puro azucar en vena acuchillado por las guitarras de Rick Nielsen. El pop y el rock alcanzan el cielo en temas como Miss Tomorrow. Adictivo.
jueves, octubre 08, 2009
KISS: "SONIC BOOM" (2009)
Me encanta equivocarme, significa que préviamente he apostado por algo, y eso es bueno. Si no aciertas o te equivocas, es que no has hecho nada y te has quedado en casa. Hace poco escribí un post de esos que disfruto escribiendo, metiéndome con el nuevo disco de Kiss, Sonic Boom, por pura intuición, ya que no lo había escuchado todavía. Imaginaba un disco plomo, vacío, rock clásico con sonido metalizado y sobresaturado, un disco mediocre como el de Paul Stanley. Celebro haber errado el tiro, porque Kiss han editado Sonic Boom y el disco me gusta. Y hacía décadas que Kiss no sacaban algo que me gustase. Psycho Circus, el disco de la reunión, 1998, ha quedado como una criatura pretenciosa y fea, donde todos echaron mano menos los Kiss que esperábamos, y así hasta ahora mismo, cuando sorprendentemente, los cuatro Kiss actuales se han encerrado en un estudio y han parido una obra ellos solos, sin extraños ni mercenarios, sin tantas pretensiones, sin empacho de hype ¿Tanto costaba hacer eso? Hijos de puta, ¿tanto costaba?
Hay dos tipos en todo esto que merecen un premio, y una colleja les daría yo a toda la legión de histéricos protestones -entre los que no me incluyo- que odiaron el día en el que Eric Singer y Tommy Thayer ocuparon el puesto y el maquillaje de Peter Criss y Ace Frehley. Bien, si Sonic Boom es bueno es justamente porque aquí no está un Peter Criss que ya no puede ni tocar un tambor de Dixan, y un Ace que hace siglos que promete increíbles discos de rock n´roll que nunca llegan. Si quieres mantenerte en la brecha mejor que te deshagas de los lastres, han pensado siempre Paul y Gene, y así hicieron, y ahora aparecen con un disco que suena a Kiss 70's de una forma que jamás habríamos imaginado, con buenas canciones, letras que por fin hablan de tías y no de lo increíble que es ser de la Kiss Army, y todo eso gracias a la energía y seriedad del profesional perfecto que es Eric Singer y de Tommy Thayer, un callado empollón del club de machacas de Gene Simmons que merece, por fin, un respeto. Con el gato y Space Ace... imaginaros, todavía estarían esperándoles en el estudio. A los 60 años no puedes permitirte bromas y si quieres continuar en el negocio debes ser inteligente y despiadado: Peter&Ace, you´re fired!
Lo mejor de este disco, como digo, es que suena a Kiss, y no solo a los Kiss setenteros sino, ojito, a los mejores Kiss ochenteros. Gene suena al Gene 80´s, Russian Roulette (la mejor pieza del disco, adictiva, ritmo divertidísimo, Gene que vuelve a ser el cazachichis de siempre...) podría haber estado en Animalize o el infravalorado Asylum (un disco que solo amamos los fans más horteras de Kiss); Por su parte, Modern day delilah es un rock potente con ese toque épico ideal para la voz de Paul y un puente que pone la piel de gallina ("just like a trigger on a loaded gun..."), con un disco que empieza con estos dos temas ya te puedes dar por servido, son diez veces mejores que todo el puto Psycho Circus más aquel anormal Carnival of souls de bonus; luego hay que reconocer que encontramos alguna medianía, como Stand, tema que podrían haber compuesto los fragel, un intento barato de hacer el típico tema Kiss de hermandad y amistad hasta la muerte; pero el disco remonta espectacularmente con Hot and cold y su excelente bajo baboso que parece todo menos que lo haya tocado Gene. Hot and cold es melliza de temas como Love´m and leave´m, del glorioso Rock n´roll Over, disco en el que este Sonic Boom parece mirarse con insistencia, una canción evidente, nada sorprendente, pero gloria bendita para los que sentimos que el sonido Kiss forma parte ya de nuestras células; All for the glory la canta Tommy, y se marca un solo por el que Ace mataría, aunque probáblemente a Ace todo esto le importe un cuerno, el estribillo es Bad Religion travestidos en Kiss, y la canción rula. Otro tema son las letras, que lógicamente carecen ya de la sucia picardía juvenil del pasado (aquellos "put your hand in my pocket, grab onto my rocket", o "gonna put my log in your fireplace") y son más convencionales y modositas. Normal.
Me parece un milagro todo esto. Se han olvidado de la coffee house, de los realitys, de los actos publicitarios y han grabado un disco con canciones. Un disco con canciones que suenan sencillas y poco sobreproducidas, canciones que a veces no son del todo perfectas, pero vamos, quién podía imaginarse esto hace dos, cinco, diez ¡veinte años! La prueba fehaciente de que este disco es lo más puro y sincero que pueden grabar hoy Gene y Paul es su reciente actuación en el programa de Letterman: espectácular sí, luces y explosiones, pero sobretodo cuatro tíos interpretando a fuego Modern day delilah, el estandarte de una colección de canciones que recuperan la esencia (esencia, dónde coño te habías metido...) del pasado, lo que ya nadie esperaba. Valoremos que unos señores maleados por los años, el negocio y una visión distorsionada de si mismos se pongan a grabar temas rockeros símplemente divertidos como Russian Roulette. Gracias Kiss, y ahora Gene, sigue tranquilo con el negocio.
miércoles, octubre 07, 2009
Serge Gainsbourg y Whitney Houston - entrevista 1986
Acabo este repaso a entrevistas televisivas míticas. Whitney Houston en la cumbre de su éxito y Serge Gainsbourg en la cumbre de sus excesos. Borracho como siempre, el creador de la super obra maestra Historie de Melody Nelson le dice a Witney que se la quiere follar, y el pobre presentador trata de salir del apuro diciendole en inglés a la estrella que: "dice que usted es muy grande", y Gainsbourg replica: "que no coño, que me la quiero follar". Buenísimo.
Bukowski - entrevista 1978
La clásica entrevista a Charles Bukowski en el programa literario francés Aphostrophes. Haciendo honor a sus propios libros, el gran Bukowski ya empieza la entrevista cocido, pero la termina absolutamente taja y a su estilo, dandose a la fuga cuando se cansa de tanto intelectual.
Iggy Pop - entrevista 1980
Un Iggy absolutamente irrecuperable y con los dientes partidos, zopaz, es entrevistado por Tom Snyder en su show. Ahora saca discos de jazz, en 1980 no había nada que hacer con él.
Lou Reed - entrevista 1974
Hubo un tiempo en que entrevistar a Lou Reed era lanzarse al vacío más absoluto de la existencia. El bueno de Lou se pasaba por el forro las promociones, y nada de lo que decía tenía sentido, se burlaba de los periodistas y de él mismo. Extraviado, jodídamente peligroso, parece que en cualquier momento vaya a sacar un machete para empezar a cortar huevos a todos los presentes.
martes, octubre 06, 2009
ADORO EL TRASH, EL BLACK METAL Y TODO ESO.
Una de mis compras en la reciente Fira del Disc fue el vinilo del bastardo The new order, gran obra de Testament, una de las bandas pioneras del trash de la Bay Area, California. Soy fan de los primeros pasos del trash o el black metal, de esas bandas que, siendo adolescentes minados de acné, rompieron con el legado tradicional, el pa amb tomàquet del metal, de bandas conservadoras como Iron Maiden o Judas Priest. Exploraron las cavernas del primer disco de Black Sabbath y se emparanoyaron hasta crear un estilo insano y salvaje, a la vez que técnico, incluso lírico, poético, como el trash. El blackmetalero Seven Churches, de Possessed, me parece uno de los cinco discos de metal más importantes de la historia, no hay nada más jodido que eso, y eran mediados de los ochenta, increíble que existiera un disco así, pura mierda salvaje a 200 km/h, capaces de joder tu infancia y hacerte volar en pedazos, Possessed eran niñatos de 15 años que en vez de botarse clases en los billares hicieron historia sin saberlo.
(Deberías poseer este disco, cabrón)
También adoro los inicios de Bathory o los suizos Celtic Frost, que eran puro arte, junto con Possessed sagrado trío de bandas precoces al otro lado del averno. Luego Testament, Metal Church, Slayer, Voivoid, Megadeth... y Metallica, por supuesto. Los ochenta en su segunda mitad, significaron la decadencia de la integridad del metal clásico en favor de la comercialidad y el pelo crepado, el glam y la MTV, pero a su vez nos brindaron el renacer del género, con estas bandas jóvenes dispuestas a trepanar oídos y llevar el estilo a la categoría de (brutal) arte. Escucho ahora mismo un disco como The New Order y agradezco la capacidad de riesgo que tuvieron estos grupos, lo mucho que se lo curraron en aquellos años para salir adelante con lo que creían. Ahora estas obras siguen frescas, y a mis 33 años sigo impresionado por su maldad y su poesía. Testament, además, se mantienen dignos y sus conciertos todavía soliviantan tímpanos y embrutecen las mentes de los nuevos adolescentes, algo imprescindible para garantizar la supervivencia del género.
REC 2
REC 2 era una inversión tan segura que no había más remedio que hacerla. Una primera parte de éxito más una campaña mediática a la altura aseguran mantener una franquicia que ya cuenta con un remake USA. Han resuelto el problema de la continuidad con respecto a la primera parte, han colado nuevos personajes (esos adolescentes, que tampoco sirven para mucho), y han terminado con una sorpresita final que más o menos se podía intuir. Han hecho lo que han podido, no creo que haya mejor forma de filmar una segunda parte de REC. Sin embargo es evidente, y lo siento muchísimo porque iba hoy al cine con una cierta ilusión, que a REC 2 no le queda nada de la magia de la primera parte, donde una periodista y su cámara acompañaban a los bomberos por el Eixample barcelonés grabando un documental y terminaban metidos en una finca modernista infestada de zombis y la niña Medeiros, que me acojonó a base de bien en aquellos últimos minutos. REC era hija de El proyecto de la bruja Blair y yo, inocente, caí como un pichón y lo pasé fatal en las dos. REC 2 en cambio, aunque no es una mala película de zombies y posesiones demoníacas, me importa un bledo. Es lo que suele pasar con las segundas partes, donde todo se explica, y la fascinación del original se va diluyendo a fuerza de repetir los mismos golpes de efecto.