miércoles, julio 23, 2008

RADOVAN KARADZIC

El ser humano y su capacidad para mudar la piel y saltar de una vida a otra. Joseph Fritzl, el mosntruo de Amsteteen saltaba en cuestión de segundos de la vida normal en el piso superior de su vivienda, con su esposa de siempre y sus hijos, a la secreta existencia en el sótano, donde también era cabeza de familia pero de su hija y sus nietos-hijos encerrados para siempre. En ambos niveles de la vivienda celebraba cumpleaños y cenas de Navidad. Dos familias, dos vidas.
Ayer detuvieron al Radovan Karadzic, el criminal más buscado del mundo, responsable de verdaderas carnicerías humanas durante la guerra de Bosnia. El otrora presidente bosnio también había dado el salto de una vida a otra, pero en su caso de forma irreversible. Con un aspecto distinto (barba que le cubría sus rasgos más identificables, gafas), ejercía en una consulta privada de medicina natural en Belgrado. De asesino de masas a humilde doctorcillo de cara sabia, bonachona y pelo blanco. De una vida a otra. Cómo debería ser para él encontrarse cara a cara con la gente de a pie, la que iba a su consulta de medicina, aconsejar a las señoras con dolores de regla o recetar hierbas medicinales a los obreros con lumbago, ¿qué sentía al caminar como los demás por la calle o pagando el billete del bus? Me parece que lo que está claro es que Karadzic tiene una capacidad de supervivencia increible, mientras todo el planeta lo buscaba desde hacía doce años, él compraba en los supermercados de Belgrado, se hacía su propia cena y cogía el autobús para ir a su consulta. No deberían haberle detenido, ahora no. Sabiendo su paradero, tendrían que haber instalado cámaras a su alrededor y observar como se comporta un ex presidente criminal entre el resto de seres humanos, los mismos por los que él no sintió jamás ninguna compasión.