jueves, octubre 07, 2010

ACE FREHLEY


Ahora que se anuncia la publicación de las memorias de Ace Frehley para 2011, todavía más elogios va a recibir su figura. Ace creó para Kiss un sonido particular, casi minimalista, un concepto que valoraba el feeling del sustain antes que la cantidad de notas por metro cuadrado, un estilo propio y original en definitiva, inimitable, y también le dio a la banda el gen de rock n´roll del que Gene y Paul eran capaces de olvidarse tan a menudo, ahora con la música disco, ahora con las óperas rock. Pero la posterior carrera del Spaceman ha sido decepcionante. Frehley´s Comet empezó bien, heavy con buenas melodías y riffs, un poco pasteurizado por la producción de mediados de los 80, pero válido. Luego la nada. Gene y Paul lo rescataron del asco vital (como al pobre Peter) en la reunión del 95, entonces su figura se reactivó, así como su carácter poco fiable, sus empanadas y sus vicios. Adoro el sonido Frehley, su disco en solitario del 78 fue el mejor de los cuatro Kiss, y su catálogo tiene una buena ristra de clásios, de Cold Gin a Rocket ride, de Parasite a Shock me, leeré su libro y me lo pasaré en grande, pero es triste que este hombre haya tirado su vida por la borda durante tantos años. Su talento se fundió con su salida de Kiss, y desde entonces ha vivido del mito y de caer extrañamente bien al fan. Durante años Gene y Paul eran los malos, los que estaban ahí por la pasta, y Ace era el auténtico, el amigo de los niños, el rockero que vive por y para el rock. Sin embargo el tiempo ha dado la razón a los primeros, porque Ace quiere la pasta como el que más, y su concepto del rock n´roll es pasarse décadas enteras sin firmar una canción decente, mientras promete y promete que el disco de su vida llegará pronto. Musicalmente, Ace está acabado, su último disco no me interesa en absoluto. Ahora es un hombre entrañable y viejo, que se cree mejor de lo que quizás es, otro genio que vive mirando al pasado. Y le sigo queriendo.