Pepe Isbert protagonizando El Cochecito, uno de los guiones de Rafael Azcona. Isbert es el abuelete que todos hubiéramos querido, con esa voz cazallosa y asmática, su cuerpecillo de hobbit, y esa energía y comicidad innatas. Un crack. El Verdugo, Bienvenido Mr. Marshall o El Cochecito, todas ellas con Pepe Isbert en el reparto, son con toda justicia, los Ciudadano Kane ibéricos. Blanco y negro, posguerra. Esos tiempos de Biscuter, aquel modelo de mini-coche que de niño tanto me picaba la curiosidad. Le preguntaba a mi abuela una y otra vez como eran los Biscuter, y ella me decía: "¡Son como zapatillas, son como zapatillas!", y yo me partía.
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