martes, julio 21, 2009

LUCINDA WILLIAMS (APOLO, 20-VII-09)

Lucinda Williams es de las pocas artistas que haya visto yo sobre un escenario que no se molestan en agradar -y mucho menos en hacer la pelota- a su público. No fuerza emociones ni desgarros, no actúa cara a la galería ni un solo segundo, es auténtica. En su discreción, en su reposada forma de cantar y, probáblemente de ver la vida, Lucinda consiguió sin aparente esfuerzo ponerme la piel de gallina en varias ocasiones ayer por la noche. Si me piden que diseñe mi concierto ideal de Lucinda, sería el de anoche, ni más ni menos, tocó mis hits particulares, todos, su voz sonó preciosa y cargada de la profundidad que solo pueden dar los años y todo lo vivido, real como ella misma, y su banda, Buick 6, la llevó en volandas. Qué grupo, bordaron cada interpretación, la electricidad de las guitarras cosía brillántemente cada tema, un gustazo, y encima disfrutaban y hacían bromitas, se nota que estaban bien ahí arriba. Right in time fue el segundo tema de la noche, y de allí a las estrellas: joyas de Essence, de Car wheels on a gravel road, World without tears... Había dos opciones, un concierto duro de pelar pero de emociones profundas al estilo de su penúltimo (¿y mejor?) disco West, o lo que finalmente sucedió: una Lucinda que prefirió saciarnos con temas más vitales (aunque luego las letras son igual de desesperadas, es increíble como escribe esta mujer, sus temas no transmiten pena ni autocompasión, sino deseo, un agónico deseo de amar y vivir), canciones tipo Real live bleeding fingers and broken guitar strings. Así, todo fue creciendo hasta la versión de AC/DC, donde ella se soltó un poco y para terminar una delicada versión de Violeta Parra, que Lucinda había aprendido hace poco e interpretó tímida, con las gafas de ver para poder leer la letra, un pequeño regalo lleno de inocencia para acabar este inolvidable concierto.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Fabuloso. Me agrada mucho como has describido ciertas sensaciones. Me gusta tu literatura.
Saludos
sfb72

Anónimo dijo...

Esta mujer es la caña. Me das mucha envidia, Marc!

salvi dijo...

Magistral como siempre! Vergüenza ajena sentí el otro día ante la "crònica" de El Periodico, articulada en torno a un silogismo simplista: si Lucinda era mejor músico cuando le daba a la priva, que vuelva a las andadas.

Penoso.

El Capi Tornado dijo...

envidia es la palabra ,joder estoy en la ruina total :)no puedo ir a ningun concierto y eso que este verano el panorama es cojonudo.Voy a ver si consigo algun Bootleg.....
Chapo por la cronica.

Joserra dijo...

Bonita crónica, sentida, sencilla ...como la música de Lu: dos acordes y la verdad. Un abrazo!

ROCK N´ROLL OUTLAW dijo...

SFB72: ¡Gracias Sanfree!

Aprendiendo: No sabía que te gustara, lástima que no pudieras ir, pero estoy seguro de que vuelve, porque la respuesta del público fue más de lo que se esperaba ella, y salió super feliz.

SALVI: Es tan indignante leer las crónicas de los diarios después de un concierto de alguien que te gusta... Reducen el rock a los tópicos de siempre, cosa que no hacen lso críticos de ópera o teatro.

EN LA CUERDA: Yo estoy seguro de que Lucinda volverá a pasarse pro aquí, así quetendrás otra oportunidad.

JOSERRA: Muchas Gracias!

The Incredible E.G.O´Riley dijo...

Llego muy tarde pero no importa. Preciosa crónica. Como siempre

Saludos amigo