miércoles, abril 21, 2010
RESTAURANTE SAÜC
Una buena cena depende principalmente de ti. A veces vas a cenar fuera y la cosa no funciona y culpas al camarero, al primer plato o al disgusto que te dieron con la cuenta, pero eso es como echarle la culpa al árbitro. Una buena cena, me refiero a algo memorable, depende en primer lugar de ti. Si estás a gusto, en paz, y si estás con quién quieres estar, entonces los demás elementos pasan a ser secundarios. A veces son los clientes quienes hacen bueno a un restaurante con su buena disposición, con malos rollos te aseguro que no comes bien ni en Arzak. La cena en el Saüc fue una noche feliz, y además en este caso el restaurante nos ayudó completando el decorado. El Saüc se esconde en el Passatge Marimon, entre el nuevo bar Velódromo, del que ya hablé aquí, y el italiano Il Buono Amici, del que también hablé. Es un local correcto y soso, como lo son ahora todos los restaurantes con pretensiones de Barcelona. Saüc cuenta con una estrella Michelín y unos precios que me parecen demasiado acordes con esa clasificación, y que pueden obligarte, aunque no quieras, a optar por el menú degustación, más ajustado de precio, a 58 euros, con aperitivos, tres platos, quesos y dos postres. La cocina es intachable, el producto excelente, con unas buenísimas judías de Sant Pau, o los guisantes y el rape en perfecta harmonía. El ritmo en sala es correcto, con la maître bien dispuesta y rápida. El restaurante se divide en dos salones, uno éstaba vacío, posíblemente era la zona fumadores, y el otro tenía varias mesas ocupadas. Saüc es un restaurante pequeño que huye de cualquier pomposidad, íntimo y quizás falto de un trazo personal más acusado, tanto en sala como en cocina, una marca, una autoría que lo englobe todo, por lo demás, muy buen restaurante, que es a lo que vamos.
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1 comentario:
Tomo nota. Pero hay tanto que hacer, tanto que comer, tanto que escuchar que no llego a todos lados.
Saludos
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