Dos locos en medio del desierto se contonean poseídos y alcoholizados, entre visiones de ángeles, demonios, sacerdotes y putas, se ríen y lloran, imploran a dios y rezan. Una de las muchas imágenes que podrían definir lo que hacen Slim Cessna y el gran Jay Munly en los conciertos de Slim Cessna´s Auto Club. Los que asistimos ayer a Sidecar hicimos una perfecta inversión. Tardaremos en olvidar la que montaron los dos apóstoles, atacando su repertorio country-gothic-gospel... whatever (leo en internet una etiqueta que mola: country-gothabilly) como los Nick Cave & The Bad Seeds más desfasados, y teatralizando sus historias encima del escenario y en la platea, entre todos nosotros. Uno como un enérgico e iluminado vaquero otro como el hermano tejano del mayordomo de Rocky Horror Picture Show. Se lo toman con humor y se lo toman en serio, es un directo apocalíptico, storytelling con banjo y sombrero a doscientos por hora. Ahora me viene a la cabeza el tramo final, con This land is our land redux, o su interpretación de Americadio, ambas del fantástico Cipher, del 2008 ¡qué bárbaro! Espero ansioso la próxima vez. No te los pierdas.
6 comentarios:
Pensaba que era hoy!!!! Me acabo de enterar que ya voy tarde. Joder, me fastidia. M egusta mucho esta banda. Maldita memoria!! Saludos.
Otra banda que me apunto, la de música que aprende uno en blogger, oye xD.
Saludos!!
Pues no los conocia, pero he leido muy buenas críticas. saludos
Yo también estuve y aún estoy en estado de shock, fue como si un tren de mercancías nos pasase por encima, ¡qué manera de rockear, una auténtica pasada! Y además, unos tíos a los que les encantaba estar con la gente, yo tengo varias fotos con Jay Munly. La próxima no me la pierdo ni en broma.
MANEL: Demasiados conciertos Manel... ¡Jaja! Lo que espero es que vuelvan pronto, porque me dejaron KO.
ÁLEX: Muchas gracias Álex.
OFERSAN: En disco son fantásticos, al estilo 16 Horsepower pero en desfase permanente y alucinado, menos oscuros pro así decirlo. Pero es en directo donde los tipos se desatan.
JOAQUIM: Sí, fue curioso como segundos antes de terminar el concierto, Jay ya bajaba del escenario para instalarse en el puesto de merchandise. Yo también me hice fotos con él, parecía amable, y jodidamente serio y fantamal. Yo adoro sus discos. Un saludo amigo!
YO VI LA LUZ!!!
DE HECHO AUN VEO LA LUZ...
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